Baldwin sostenía el revólver Colt .45 durante los ensayos de la producción en octubre de 2021 cuando fue accionado, hiriendo a Halyna Hutchins, quien murió poco después.
La fiscal del primer distrito judicial de Nuevo México, Mary Carmack-Altwies, anunció a comienzos de enero que había suficiente evidencia para presentar cargos criminales contra el actor estadounidense. “Hoy hemos dado otro paso importante para garantizar justicia a Halyna Hutchins”, dijo y agregó que en Nuevo México nadie está por encima de la ley, y habrá justicia.
La encargada de las armas de la película, Hannah Gutierrez-Reed, también fue acusada por el mismo caso. Si son condenados, ambos podrían enfrentarse a penas de hasta 18 meses de cárcel y una multa de 5.000 dólares. Agravantes por uso de armas podrían elevar esa sentencia hasta cinco años, de acuerdo con el marco legal estadounidense.
Durante un entrenamiento con armas, el actor parecía “distraído y hablando por teléfono con su familia”, según un documento hecho público el martes por la fiscala.