Sophia López Moreira (hermana de la primera dama), su esposo Luis Pettengill y los tres hijos menores de la pareja, además de Lady Luna Villalba son los paraguayos que perdieron la vida en la tragedia que deja aún muchas heridas por cerrar, multimillonarias indemnizaciones y años de trabajo para dilucidar las razones del derrumbe.
Dos de las 98 víctimas mortales, muchas de ellas de origen latinoamericano, eran Miguel Pazos, de 56 años, y su hija, Michelle, de 25.
Carlos Pazos, abuelo de la familia, se enteró de la “desgracia” ocurrida en el edificio de 12 plantas de esta ciudad aledaña a Miami Beach en La Habana, donde vive y desde donde no ha podido viajar a Estados Unidos para despedirse de su hijo y su nieta.
“Nunca nadie pudo imaginarse un final así” para ellos, lamenta en declaraciones a Efe desde La Habana sobre la muerte de su hijo, un “hombre que le dio la vuelta al mundo” y que aquella noche estaba en el edificio Champlain de Surfside con su hija, de visita desde Canadá, donde vivía con su madre y su hermano.
SIN RESPUESTAS. Como él, muchos familiares y víctimas del derrumbe piden explicaciones a las autoridades, aunque las respuestas tardarán en llegar.
Así lo explicó a Efe la codirectora de las investigaciones que realiza el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), Judith Mitrani-Reiser, que estuvo dos meses trabajando de sol a sol en los restos del edificio, que fue demolido en su totalidad semanas después de su derrumbe parcial.
Mitrani-Reiser, codirectora de la investigación junto con Glenn Bell, indicó que la fase “más intensa” de la investigación concluirá a fines de setiembre del 2023 y el informe final y las recomendaciones de NIST se darán a conocer un año más tarde.
INDEMNIZACIONES. Carlos, de 85 años, dice que lo único que quiere ya en la vida es que EEUU le dé un visado para poder viajar a Miami para pasar unos días con sus hijos y nietos e ir donde Miguel y Michelle fallecieron y al lugar donde reposan sus cenizas.
Eso, nada más. Nada de las multimillonarias indemnizaciones que se han aprobado ya para las víctimas: “Eso, que se lo den a mi nieto. Yo lo único que quiero es obtener una visa”.
Las familias de las víctimas del edificio alcanzaron ya un acuerdo con las aseguradoras por 997 millones de dólares para cerrar uno de los temas judiciales pendientes, como las demandas por homicidio culposo que todavía siguen su proceso.
El Champlain Towers South, construido en 1981, estaba en medio de un proceso conocido como “recertificación”.