De los 166 reclusos que fallecieron en custodia del Estado en los lugares de reclusión desde el 2013 al 2016, 95 estaban procesados; es decir, no fueron encontrados culpables legalmente de haber cometido algún hecho punible.
El aparato punitivo del Estado ha abusado en los últimos años con las medidas de prisión preventiva, a pesar de que este sea un elemento excepcional dentro del Código Procesal Penal (CPP) paraguayo, y las penitenciarías se han llenado de personas sin condenas.
6 de cada 10 fallecidos dentro de las cárceles eran solo supuestos responsables de un hecho punible, bajo la presunción de inocencia.
MUERTE RÁPIDA. La mitad de las personas fallecidas en condiciones de encierro en el Paraguay no llegaban a los dos años de encarcelamiento. El estudio de las muertes en custodia del Estado del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura revela que el 50,1% de los fallecimientos ocurrieron antes de que la persona cumpliera los 2 años de privación de libertad.
32 personas fallecidas murieron antes de los seis meses de encierro, 22 de ellas entre seis meses y 12 meses, y 29 entre un año y dos años de privación de libertad. Es decir, de 166 reclusos fallecidos en las penitenciarías del país, 83 no pasaban los dos años de encierro.
promedio. En Paraguay, en promedio, cada una semana muere una persona privada de libertad en custodia del Estado paraguayo, ya que el informe abarca las muertes en condiciones de encierro de los años 2013, 2014, 2015 y 2016, revela el informe del MNP.
Tacumbú. El estudio menciona que independientemente del tiempo de permanencia en las cárceles, Tacumbú es la principal cárcel donde mueren las personas en privación de libertad.
De las 32 muertes ocurridas en las personas que llevaban menos de seis meses encarcelados, 14 sucedieron en Tacumbú, seguidas de cinco muertes en la cárcel de Ciudad del Este.