Tras su histórico triunfo por 2-0 ante Argentina de visitantes el pasado jueves, los ecuatorianos buscan hacerse respetar en su casa, a 2.850 metros de altura, donde juega en forma permanente desde la carrera para la Copa del Mundo de 2002. Desde entonces, Ecuador siempre ha triunfado sobre Bolivia.
Los bolivianos vienen de caer el jueves ante Uruguay por 0-2 y esperan lavar la cara tras la pobre exhibición en casa.
El único jugador que no estará en Ecuador es Pedro Quiñónez, lesionado.