La Academia mostró mayor oficio y es por eso que se quedó con los tres puntos, en un juego con muchas interrupciones.
La apatía durante el desarrollo del enfrentamiento fue de principio y hasta casi el final.
Capiatá se entusiasmó, pero no tuvo un argumento futbolístico convincente como para abrir el marcador.
Nacional, por su parte, perdió esa solvencia que tenía en todas las líneas y cayó en un mar de imprecisiones.
La Academia trató de paliar el desorden colectivo con sus individualidades donde Héctor Bustamante y Marcos Melgarejo fueron protagonistas.
Capiatá realizó bien su trabajo hasta el medio, pero adelante nunca pesó y los zagueros de Nacional, Raúl Piris y Gustavo Velázquez, pasaron una tardecita tranquila.
pena máxima. El volante uruguayo Álvaro Peña ingresó y recibió el impacto de Cristhian Colmán, en el área, en un claro penal. De la ejecución se encargó Marcos Riveros, quien definió con clase.
Este tanto al final le sirvió a Nacional para su primer triunfo en el Apertura.
Ya no hubo tiempo, por más que quiso, para la reacción del elenco escobero. La irregularidad en Capiatá fue muy notoria, pues la semana pasada realizó un gran partido frente a Olimpia, al que le ganó por 2-1, pero ayer careció del juego colectivo que lo identificaba.
Nacional aún no encontró su mejor forma, pero todas sus deficiencias las está supliendo con la voluntad de los integrantes de su plantel.