La tranquilidad habitual con que se desenvuelve San Bernardino durante casi todo el año se rompe en el verano con la llegada masiva de turistas a la Villa Veraniega para disfrutar de sus playas y de todos los servicios que ofrece a los visitantes.
El fin de semana pasado el balneario se vio sobrepasado por los turistas que se llegaron en gran número y que llenaron los hoteles y restaurantes, según manifestaron los locatarios.
Estos se mostraron satisfechos por la masiva concurrencia –estimada en alrededor de 100.000 personas– que llegaron durante el fin de semana último hasta las playas y a descansar en el célebre balneario.
La mayoría de los hoteles tienen sus reservas aseguradas, sobre todo, durante los fines de semana, hasta finales de enero e incluso febrero.
Este es el caso del tradicional Hotel del Lago, cuyo gerente, Osvaldo Codas, resaltó su contento por cómo está marchando la temporada hasta ahora para el sector hotelero.
Agregó que se realizó un trabajo coordinado entre las autoridades municipales y policiales para garantizar la seguridad y la limpieza en la ciudad. “Los hoteles se encuentran con el ciento por ciento de sus habitaciones ocupadas o prevendidas hasta finales de febrero. Quedan algunos lugares para los días de la semana, pero no muchos. La afluencia es el doble del año pasado, pues hay una clase media importante que ahora elige venir a San Bernardino, desde que se habilitó la ruta nueva de Luque”, adujo Codas.
Agregó que la Villa Veraniega cuenta actualmente con una gran variedad de hospedajes a elegir en caso de que ya no existan vacancias en sus hoteles tradicionales, como la recientemente habilitada Posada Mbocaya, así como los hoteles Arroyito Suit, Pueblo, La Jolla, el Tava Glamping y el Ecoparque Yrupê.
A TOPE. Luis Escobar, propietario de Eco Parque Yrupê, indicó que también se encuentra con la ocupación de todas sus habitaciones –cuenta con 12 en total–, sobre todo, durante los fines de semana.
Agregó que también ofrecen la opción pasar el día en el parque, frente al lago, pagando un acceso que posibilita a los visitantes acceder al servicio de restaurante, senderismo, piscina, alquiler de bicicletas y canoas para navegar por el lago.
Escobar indica que si bien el fin de semana pasado estuvieron con la ocupación al máximo, observa que el año pasado recibieron a más visitantes.
Estima que este año el clima les jugó una mala pasada durante el inicio de la temporada estival.
PARA COMER. Las opciones gastronómicas también aumentaron en la Villa Veraniega, con nuevos restaurantes habilitados, como Lo de Osvaldo y la Pizzería San Genaro.
Vidal Domínguez, chef de la pizzería, indicó que el fin de semana último todos los locales gastronómicos estuvieron al máximo por la altísima cantidad de visitantes que registró la ciudad y que hizo que extendieran sus horarios de atención.