Liz Guillén, de #UNAnotecalles, señala que si los directores de posgrado y de otras áreas no van a marcar o no asisten es porque tienen la manera de solucionar el tema de sus salarios. “Si pueden solucionar el de ellos, también pueden hacer lo mismo con los funcionarios. Pero nosotros (los estudiantes) evaluaremos esta situación”, expresó la líder estudiantil.
Asamblea. Aún no hay nada definido con la posibilidad de que pueda realizarse una nueva asamblea que revea la decisión adoptada en la última. Guillén cuenta que están acudiendo a los asambleístas que votaron a favor de la reforma. Luego intentarán conversar con los que se pronunciaron en contra. “Entre el lunes y martes evaluaremos el resultado dependiendo de las respuestas que tengamos”.
Guillén menciona que luego de realizar esas conversaciones con los asambleístas evaluarán los plazos para que se dé una nueva sesión del Consejo Superior Universitario. La propuesta de los estudiantes para la reforma del estatuto fue derrotada por 38 votos en contra y 18 a favor, con la ausencia de tres consejeros.
Adelanta además que se mantendrán frente al Rectorado si los funcionarios intentan ingresar. Revela que entre los trabajadores de la UNA, son varios los que apoyan sus reclamos.
En la tarde de ayer se realizó el San Judas de la UNA, donde los juegos, como Plata Pota Jeheréi, Rata Kandil, entre otros, hacían referencia a la situación de la UNA.
Análisis. El presidente del Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofia de la UNA, Diego Díaz, señala que la movilización es parte de una gran lucha dentro de la UNA. A diferencia del año pasado, que concentraba las protestas en un figura, en esta ocasión se trata de impulsar el cambio en la estructura universitaria.