El primero de los citados, en el caso de ser aprobado, iba a ser el séptimo desmembramiento de Villa Hayes.
Ambos tienen como cámara de origen Diputados, en donde fueron aprobados y volverán para ser tratados en segunda vuelta.
Un grupo de habitantes de ambos departamentos que esperaban la aprobación de los nuevos distritos se apostaron en la platea del Senado para seguir el debate.
Para ambos casos hubo disparidad de criterios al interior mismo de las bancadas, que votaron en forma dividida.
El presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales, Julio César Franco (PLRA), leyó el dictamen que fue en mayoría por el rechazo.
Alegó que cuando surgen creaciones de nuevos distritos se contraponen los sentimientos en la comunidad, creando angustia, desazón y congoja entre los que están en contra, y alegría en los que apoyan.
Sostuvo que se debe tener en cuenta una serie de factores como la delimitación territorial, la capacidad económica y el relacionamiento con las demás comunidades.
En la Comisión de Asuntos Departamentales se emitieron dos dictámenes, uno a favor y otro por el rechazo.
El senador liberal Luis Alberto Wagner mencionó que miembros de la comisión fueron hasta Remansito y verificaron la situación por la que están atravesando los habitantes del lugar.
Refirió que la zona está en expansión por la subestática de la línea de 500 kV y la instalación de industrias.
Indicó que tiene 17 mil habitantes, y cuentan con 7 escuelas y 7 capillas, construidas por la comunidad.
El oviedista José Manuel Bóbeda abogó a favor.
Su correligionario Jorge Oviedo Matto dijo que Villa Hayes es un feudo de dos familias y que era amigo de ambas.
Anunció su voto a favor porque el próximo lunes organiza una chocolatada en el lugar y no quería tener problemas con los pobladores.
El colorado Enrique Bacchetta refirió que no convenía crear municipios pobres.
Se votó, y 27 lo hicieron por el rechazo.
Las mismas argumentaciones primaron en el caso de Maracaná. Hubo 23 votos en contra, quedando rechazado.