López comentó que el fin de semana pasado estuvieron aproximadamente 45 uniformados trabajando en la zona de Cordillera, mientras que para esta ocasión aseguran que estarán más de 100 efectivos, ya que se sumará la dotación de San Bernardino.
“Estaremos trabajando con la Fiscalía, Policía Caminera y de Tránsito, realizaremos pruebas de alcotest y control aleatorio de establecimientos donde vendan bebidas alcohólicas a menores y menores de edad manejando”, señaló.
El fin de semana pasado se pudo observar el descontrol en la villa veraniega en donde la custodia fue escasa, no así la masiva ingesta de alcohol y polución sonora hasta el domingo por la mañana. El intendente de San Bernardino, Luis Aguilar, reconoció que el fin de semana pasado se sintieron rebasados por la cantidad de turistas
CONTRADICCIÓN. Durante toda la semana, en la Comuna de San Ber no tenían bien definido cómo iban a encarar el operativo ante la importante aglomeración. El director de Turismo y Desarrollo de la Municipalidad, Ernesto Rosato, expresó de manera contundente que por medio de una ordenanza iban a restringir la venta de bebidas alcohólicas en todos los comercios que se encontraban en proceso a ser notificados y que las multas serían de hasta 10 jornales.
“Luego de las 3.00 tendrán que suspender la comercialización y podrán reactivar a partir de las 9.00 de la mañana”, refirió
Rosato ayer expresó que tras la reunión con los jefes policiales para el operativo, decidieron no realizar la restricción. “Era la intención, pero no va a haber ordenanza sino controles”, señaló.