Serra recibió al diputado venezolano Luis Florido, presidente de la Comisión de Política Exterior de la Asamblea Nacional de ese país, y manifestó el pleno respaldo de Brasil al referendo que pudiera poner fin a lo que calificó de régimen autoritario.
El canciller subrayó que el referendo está previsto en la Constitución venezolana, pero sostuvo que el Gobierno de Maduro lo quiere estirar, para en caso de perder dejar al vicepresidente en el cargo e impedir unas nuevas elecciones. Según la Constitución venezolana, la realización del referendo puede ser solicitada cuando se cumple la mitad del mandato, lo que en el caso de Maduro ocurrió este año.
Si la consulta se realiza este mismo año, deberían ser convocadas unas nuevas elecciones, pero si fuera celebrada en el cuarto año del mandato, este será completado por el vicepresidente, que en el caso de Venezuela no es electo, sino designado por el gobernante.
La oposición venezolana ya ha puesto en marcha el mecanismo, pero sostiene que el Consejo Nacional Electoral (CNE) demora el proceso, a fin de favorecer la permanencia del chavismo en el poder.
Florido, a su turno, pidió apoyo de Brasil y toda la comunidad internacional a una gran marcha que la oposición prepara para el 1 de setiembre para exigir más celeridad al CNE, a fin de que el referendo se celebre este mismo año. En ese marco, Serra instó a que todos los gobiernos del mundo pidan que sea este año a fin de que Venezuela pueda dejar atrás esta fase autoritaria. EFE