Fuentes del Poder Ejecutivo mencionan que ya se está cerca de fijar la deuda de la binacional con el Tesoro argentino y se habla de USD 6.700 millones, monto que está por arriba de lo que planteaba Paraguay en un primer momento (USD 5.500 a USD 6.000 millones).
Vale mencionar que los argentinos habían renunciado a cobrar los intereses (unos USD 12.000 millones) por los aportes que hicieron para construir la represa, pero no así a las actualizaciones. Por este concepto, las autoridades del vecino país pretendían recibir entre 9.000 a 11.000 millones (actualizando a la fecha el valor de los aportes entregados).
Paraguay había planteado conciliar todos los números, teniendo en cuenta la deuda de Ebisa con la EBY, por haber llevado energía desde 1994 a la fecha, y por haber pagado solo una parte, ya que el resto se comprometió, con papeles, a abonar posteriormente.
Restará ver si para calcular la nueva cifra entró a cotejarse la compensación por territorio inundado, que le adeuda la EBY a Paraguay y que asciende a USD 1.000 millones.
Hasta el momento, la propuesta paraguaya se maneja herméticamente. La semana pasada autoridades del Gobierno solo se limitaron a afirmar que ya hay acuerdo en un 99% y solo faltaba determinar el monto de la deuda, para luego fijar una nueva tarifa de venta de energía de Yacyretá.
postura senado. La Cámara de Senadores había fijado postura sobre las negociaciones con Argentina y exigió al Ejecutivo no utilizar la Nota Reversal de 1992, a la hora de analizar los números y fijar la nueva tarifa. Ese documento (que modificó el precio de venta de energía) no fue aceptado por el Congreso Nacional. Además, instan a que se cumpla irrestrictamente el Anexo C, que indica que el país que más energía consumió de la EBY sea el que asuma más responsabilidad en el pago del pasivo por la edificación de la hidroeléctrica. El Senado tendrá la última palabra a la hora de aceptar o rechazar el acuerdo con Argentina.