El ministro del Interior, Lorenzo Lezcano, negó haber prometido u ofrecido dinero y casa al suboficial Gustavo Florentín para que asumiera la culpa del asesinato de Rodrigo Quintana, el joven dirigente político liberal asesinado el 1 de abril en la sede de Partido Libera Radical Auténtico (PLRA).
En ese sentido, el titular de la cartera de Estado indicó que se pone a disposición de la Fiscalía para cualquier averiguación, tras las acusaciones realizadas por Florentín el pasado lunes, luego de declarar por más de 9 horas ante el Ministerio Público.
El ministro explicó que solamente una vez habló con el suboficial y fue en el despacho del comisario Abel Cañete, en Investigación de Delitos, y fue el 1 de abril y ante un grupo de personas de la Fiscalía y Policía. “El comisario Abel Cañete me llama para comentarme sobre ciertos inconvenientes que había con la Fiscalía por cierta desconfianza que existía hacia la Policía. Al llegar (a Investigación de Delitos), encuentro a un grupo de 15 a 20 personas que estaban en el despacho del comisario (Cañete), realizando un careo entre Arnaldo Báez y Gustavo Florentín”, detalló Lezcano en una nota con Radio Monumental AM.
Sobre el punto, precisó que durante el careo entre Báez y Florentín se llegó a la conclusión de que el disparo fue hecho por el suboficial Florentín. “Fue en ese momento en que se acercó a mí y me pidió que no se le abandone y donde le dije que le íbamos a asistir, pero nunca, en ningún momento, le dije que asuma la responsabilidad”, recalcó el ministro.
Posteriormente, el titular del Ministerio del Interior reiteró: “Nunca hablé cara a cara con él (Florentín), solo esa vez que estaban muchas personas”.