GAZA y JERUSALÉN
Dos soldados israelíes murieron ayer en un ataque transfronterizo perpetrado por militantes de Hamás, dijo el ejército del Estado judío, en un día en que el número de palestinos fallecidos por el conflicto se elevó por encima de los 300.
El ejército israelí dijo que otros cuatro soldados resultaron heridos en el ataque llevado a cabo por combatientes que usaron un túnel oculto para llegar a Israel.
Un hombre armado de Hamás murió, mientras que el resto del grupo se las arregló para escapar y regresar a la Franja de Gaza, añadió el ejército. Israel envió el jueves fuerzas terrestres a Gaza, un enclave controlado por Hamás, luego de que 10 días de bombardeos aéreos y navales lograran detener el lanzamiento de cohetes desde territorio palestino.
Israel se ha jurado destruir la red de túneles y capturar los arsenales de misiles que están en poder de militantes.
Pero la incursión terrestre ha estado hasta ahora lejos de someter a Hamás y sus aliados, que lanzaron más de 90 cohetes contra Israel el sábado, dijo el ejército israelí.
Uno de los proyectiles causó la muerte de un hombre y provocó heridas en dos niños en un pueblo del sur de Israel, dijo la policía.
Funcionarios de Gaza dijeron que al menos 335 palestinos, entre ellos 70 niños, han muerto en un conflicto que ya se extiende por 12 días. Por parte de Israel, tres soldados y dos civiles han muerto. Los esfuerzos diplomáticos para garantizar un alto el fuego, que implica entre otros a Egipto, Qatar, Francia y Naciones Unidas, no han logrado prosperar.
Hamás rechazó un intento iniciado por El Cairo la semana pasada para poner fin a los combates.
El sonido de las explosiones sacudió Gaza durante el día y las sirenas sonaron en repetidas ocasiones en los pueblos y ciudades del sur y centro de Israel, advirtiendo la aproximación de misiles.
Ocho miembros de una familia palestina, entre ellos un bebé de seis meses y dos niños de tres y 13 años, murieron durante la noche, cuando un proyectil israelí cayó en una vivienda en Beit Hanoun, en el noreste de Gaza, dijeron funcionarios. “Oh, Dios. Oh, Dios”, dijo un pariente de los niños completamente consternado, mientras se golpeaba repetidamente la cabeza contra una pared.
Las hostilidades entre las dos partes se intensificaron tras la muerte el mes pasado de tres estudiantes judíos, en un hecho que Israel culpa a Hamás, que no ha confirmado ni negado su participación en este hecho. El asesinato de un joven palestino en Jerusalén alimentó aún más las tensiones.
Máquinas retroexcavadoras e ingenieros israelíes trabajaron el sábado en la frontera oriental de Gaza, dejando al descubierto 13 túneles, dijo el portavoz militar, teniente coronel Peter Lerner.
El Ejército israelí instó a los palestinos a abandonar un área cada vez mayor de Gaza antes de que se realicen otras acciones militares en el enclave mediterráneo. Los lugareños dicen que cerca de la mitad de la población del territorio de 1,8 millones de habitantes ha debido trasladarse.