“El cuarto hombre no es un agente de la Senad, no estaba con el equipo en el interior del móvil donde sí estuvieron el capitán de Ingeniería Enrique Daniel Piñánez Ciancio, el suboficial de Infantería José Manuel González Ferreira y el agente especial de la Senad, Juan Manuel Jara”, dijo el general (SR) Herminio Piñánez, padre del militar muerto en Concepción en el 2014. “Siempre hablaron del cuarto hombre, pero tratan de confundir”, refirió Piñánez.
La única versión que había es lo dicho por Juan Jara. Del otro (cuarto hombre) nadie sabía nada, hasta que apareció para incorporarlo en el plan de acción contra la ACA, porque conocía bien a la banda, era proveedor de ellos. Entonces se creyó lo que dijo Juan. “Todos se pusieron de acuerdo para dar una versión, pero nadie se acercó a explicarnos nada”, aseguró.
“Hasta ahora, no hay ninguna versión oficial de lo que pasó. Hasta me reuní con el presidente (Horacio Cartes), en junio del 2015 con Sandra, (Quiñónez), quien al principio parecía que iba a arrasar con todo, pero nada. Me eludía sistemáticamente en el 2016, cuando antes parecía que iba a esclarecer todo, sin importar quien sea el responsable. Nadie se acercó a decirnos nada. ¿Por qué el Gobierno oculta? ¿Qué quiere ocultar?”, se preguntó el ex uniformado. “Porque no existe investigación, todo es encubrimiento y engorroso”, se respondió a sí mismo.
“Yo fui tres veces a hablar con Jarvis Ximenes Pavão y vi el video donde habla el cuarto hombre y dice que Juan Manuel Jara fue el que salió de la camioneta y le entregó el disparador de la dinamita que debía entregar en el campamento, pero al colocarle en su bolsillo, apretó y explotó, declara el misterioso hombre en el video”, señaló el general.
Se ratificó en que las autoridades dijeron otra cosa, que todos se pusieron de acuerdo para dar una versión, pero cayó todo porque fue una mentira todo y no hay interés de hablar de esa persona.
“NO TENGO MIEDO”. “Hay muchas cosas ocultas y me cuentan. No puedo revelar por falta de pruebas, pero cuando se pueda y con el tiempo, quizás. No tengo miedo. Desde que mataron a mi hijo, se me vino la estantería abajo. Con eso se desarticuló mi familia, asi es que, no tengo nada que perder. No tengo miedo a que me liquiden”, dijo don Herminio, al comentar que su hijo le contaba que en reiteradas ocasiones le pidieron salir del Norte, porque en algún momento lo iban a matar, porque investigaba muchos casos. Además, conocía cómo funcionaba la mafia en la zona, la ruta del narcotráfico, y cómo se tejía la rosca que imperaba en el territorio. “Hablaba de la corrupción imperante en la zona y la Fuerza de Tarea Conjunta, sabía mucho. Tengo mis conclusiones, pero hay mucha gente metida, se encubren todo; entonces, uno debe pensar bien cómo va a avanzar en una investigación. Quizás van a destituir al fiscal Joel Cazal, pero van a ofrecer su cabeza para amortiguar todo. Hay una rosca demasiado grande en el Norte y mi hijo sabía mucho. No hay dudas de que a él lo mataron y mataron a un policía inocente. Quien ordenó, no sé", dijo por último.
No llevaron nada para indagar
La computadora del capitán de Ingeniería Enrique Daniel Piñánez Ciancio fue retirada por la viuda y nunca el Ministerio Público la buscó para registrar qué contenía, expuso como ejemplo el militar retirado Herminio Piñánez.
También recordó que la esposa del uniformado logró descubrir que el teléfono celular fue usado hasta cuatro días después del hecho. Esa conexión tampoco fue indagada para saber con quién se comunicó la persona que manipuló el teléfono de la víctima. Lo que llamó la atención de los denunciantes es que la billetera y el arma de Piñánez no se dañaron con la explosión.
Sandra no conoce sobre el video del que habla Piñánez
La fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, indicó que está analizando realizar cambios y se reafirmó en que en el caso del asesinato del capitán Enrique Piñánez, ella solamente cumplió el papel de coadyuvante para tomar declaraciones en Asunción.
Quiñónez respondió que no tiene conocimiento sobre el video donde se observa al cuarto hombre que presionó el botón que causó la explosión de una bomba que preparó el capitán.
“En primer lugar, fui nombrada coadyuvante en el 2015 y Piñánez fue asesinado en el 2014. Solamente para tomar algunas declaraciones; a todos lo que tenía que tomar y estaban en Asunción lo he hecho”, expresó Sandra.
La nueva fiscala general del Estado manifestó que no tuvo mayor información porque no era la titular de la causa. Fue cuando se le consultó sobre el papel que cumplió Jarvis Chimenes Pavão.
Herminio Piñánez, padre del capitán asesinado, reveló que accedió a un video a través de Pavão, donde se ve al cuarto hombre. Inclusive, indicó que el ex ministro del Interior Francisco De Vargas solicitó ayuda a Pavão (acusado por lavado de dinero) para la compra de un aparato de escucha y rastreo, valuado en USD 380.000, como moneda de cambio para ayudar a su madre del capo narco, quien según él, era investigada por lavado de dinero.
“No puedo tener esas informaciones, porque no soy la titular de la causa. No estuve en el lugar. A cada declaración se le iba entregando al general Piñánez. Respetemos el dolor de la familia”, respondió.
El general Piñánez acusó a Sandra Quiñónez de que no le entregó la carpeta fiscal y que le negaron.
La nueva titular del Ministerio Público consignó que está evaluando la gestión de los fiscales y que si amerita realizar cambios, lo hará.
El senador Eduardo Petta anunció que como miembro del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) exigirá al Ministerio Público la carpeta fiscal sobre la muerte del capitán. Hasta el momento persisten las dudas acerca de la investigación.