20 abr. 2024

La historia no oficial de Juana María de Lara

La historia oficial dice que Juana María de Lara fue la emisaria de los revolucionarios y la primera mujer en festejar el triunfo de la Independencia, llevando un ramo de flores rojas, blancas y azules que luego inspiraron los colores de la bandera.

Sin embargo, dados los escasos registros, la historiadora Ana Barreto investigó la vida de esta mujer para encontrar omisiones, incongruencias y dudas sobre su rol en el movimiento revolucionario.

Como parte de la celebración de los 200 años de la Independencia, el Diario Última Hora se hace eco de esta investigación en su Revista Vida Especial Bicentenario, que llegará a manos de los lectores el jueves 12 de mayo.

BIOGRAFÍA. Juana María de Lara nació en Asunción en 1760. Pertenecía a una clase social acomodada y durante toda su vida estuvo vinculada a la Iglesia Católica (formó parte de la Cofradía del Corazón de Jesús y de la Tercera Orden Franciscana).

A los 27 años contrajo matrimonio con José Díaz de Bedoya, viudo cuyos hijos crió. Juana vivió hasta su muerte -en 1825- sobre la calle 14 de Mayo, frente a la casa de los hermanos Martínez Sáenz (hoy Casa de la Independencia). Analizando los antiguos testamentos, Barreto confirmó que Lara no solo provenía de una familia económicamente muy bien situada en la Asunción de 1811, sino que también estaba ligada al Gobierno español, pues su padre, Carlos de Lara, era administrador del ramo de guerra, un cargo altísimo que tenían las personas durante el Gobierno español.

Los escasos textos históricos que mencionan a Lara, los tipos de flores que supuestamente llevó la mujer y la imagen que se construyó sobre ella son también analizados en la revista Vida.

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