La fiscala Marlene González le imputó por supuesta producción de documentos no auténticos. Además, solicita el arresto domiciliario del encausado.
En la recusación en otra causa del procesado comisario Tomás Paredes Palma, señala que la fiscala Brígida Aguilar pidió sin orden judicial varios números telefónicos, con causas que no correspondían.
Así se inició una investigación de la Inspectoría, tras lo cual la fiscala Aguilar denunció que le falsificaron la firma.
Son dos oficios remitidos a Tigo, una del 23 de octubre del 2017, donde pedía teléfonos de varias personas, entre ellas, de Raúl Fernández Lippmann, entre otros. Ese oficio fue respondido vía email. El segundo oficio, de fecha 28 de noviembre, recibido el 30 de ese mes por Tigo, pidió datos de teléfonos de varios políticos, entre ellos, Mario Abdo Benítez.
Para esta segunda ocasión, Tigo solicitó más datos, y ese oficio fue recibido por Correa Domínguez. El mismo, según la imputación, recibió el oficio, pero no comunicó a la fiscala, con lo que por eso lo imputaron.