La doctora Ruth Zayas, directora de Apoyo y Servicios, explicó a ÚH que se detectaron las filtraciones y que el personal del Departamento de Mantenimiento ya evaluó el techo que se prevé reparar hoy con un equipo especial.
“Se detectaron filtraciones que afectaron al cielorraso. Evaluado por mantenimiento, estas serán reparadas, mañana, con un equipo especial. Aparentemente, a causa de desperdicios arrojados en los baños que obstruyen las cañerías”, señaló la doctora Zayas.
El hecho no afectó supuestamente a los pacientes, pero se bloqueó la sala con problemas de cielorraso, según la directora de Apoyo y Servicios.
El Servicio de Neonatología se encuentra en el ala norte del segundo piso, dispone de salas refaccionadas desde diciembre del 2015 con casi 80 camas de internación.
El cielorraso cayó justamente en horario de visita de los padres a los bebés prematuros internados. El caso asustó a los asegurados, que expresaron su indignación por lo que aconteció. En el Servicio de Neonatología están internados recién nacidos y prematuros, que necesitan cuidados especiales por su estado de salud.
UN HECHO FRECUENTE. Las goteras y filtraciones ocurren con frecuencia en el Hospital Central del IPS, debido a que las personas lanzan todo tipo de objetos y basuras al inodoro, desde pañales hasta huesos, que trancan el sistema y crean un caos de aguas negras en los baños públicos, admitió en su momento el arquitecto Augusto Alcaraz, jefe de Mantenimiento.
Tal es el caso del pasado mes de enero, los pacientes con cáncer sufrieron un día de viacrucis por la filtración de agua, provenientes de los baños del primer piso, que generaron goteras en la sala de consultas y quimioterapia del Hospital Día del Servicio de Oncología del Hospital Central.
Los funcionarios de Mantenimiento se encargan diariamente de destrancar los baños públicos. El Hospital Central dispone de más de 1.200 camas y se estima que recibe diariamente a 20.000 asegurados, una cifra exorbitante que trae de la mano el mal uso de las instalaciones.