Por: Wendy Marton
En TW: @WendyMarton
Medir el impacto económico de la distribución de los fondos provenientes de la colocación de los bonos soberanos es aún muy difícil, coincidieron en señalar el viceministro de Economía del Ministerio de Hacienda, Daniel Correa, y el economista Julio Ramírez, del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (Cadep). Desde el 2013 hasta este año se colocaron USD 1.780 millones en bonos soberanos y en 2016 se planea colocar alrededor de USD 740 millones de estos papeles en el mercado internacional.
De los USD 1.468 millones del dinero proveniente de la colocación de la deuda en el mercado externo, el 45,8% fue destinado a obras viales; el 29,4% a pagar deudas; el 17,6% al mejoramiento del servicio eléctrico; el 2,8% al mejoramiento del horno de la Industria Nacional del Cemento (INC), y el 1,5% al sector agrícola, entre otros.
De acuerdo con datos del Ministerio de Hacienda, una de las instituciones que más se beneficiaron con esta fuente de financiamiento es el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), que utilizó los fondos en programas de inversión, como la elaboración de estudios y proyectos de inversión, mejoramiento y construcción de muros de contención, conservación y mantenimiento de obras viales y apoyo al programa de modernización del sector transporte, entre otros.
En el caso del Ministerio de Salud Pública, se financiaron mejoras y construcciones en distintas regiones sanitarias del país. Por su parte, al Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) le fueron transferidos fondos de la última emisión que sirvieron para la adquisición de tierras y para saldar deudas pendientes de pago de gastos de capital de ejercicios anteriores. Entretanto, Hacienda destinó USD 433 millones a cancelar deudas.
Efecto económico. “El efecto económico aún no se puede sentir. Dependerá mucho de la eficiencia en la ejecución de las obras y otros proyectos llevados a cabo por los distintos organismos. Si bien la mayoría de los recursos ya están transferidos, cada proyecto tiene su ciclo, lo cual inicia con los estudios de factibilidad.
Cabe recordar que en el caso de Paraguay, primeramente se obtuvieron los recursos para luego estructurar los proyectos”, señaló Ramírez.
Agregó que el próximo año, la economía dependerá de una manera directa de la ejecución de las obras públicas, ya que se espera un estancamiento o recesión en el sector privado, afectado por la coyuntura a nivel mundial. Añadió que, por lo tanto, es más que necesaria una fuerte inyección de recursos del Gobierno en obras, ya sean financiadas con bonos, con recursos del Tesoro, con financiamiento de organismos internacionales o por medio de las alianzas público-privadas (APP).
Correa indicó que medir el impacto en forma general, llevará su tiempo, debido a que existen varios proyectos que hoy están siendo financiados con dichos recursos.