El suboficial segundo Gustavo Florentín, imputado por homicidio doloso por la muerte del joven universitario Rodrigo Quintana –dirigente de base liberal–, se animó a prestar declaración indagatoria ante el fiscal Hernán Galeano, tras cuatro meses de haber ocurrido el hecho.
La declaración inició a las 9.00 y culminó nueve horas después; es decir, a las 18.00 horas. El uniformado comentó detenidamente lo que aconteció entre la noche del 31 de marzo y la madrugada del 1 de abril.
Al salir del despacho del fiscal interviniente lo primero que dijo fue: “Yo no fui el que efectuó el disparo, soy inocente”.
Posteriormente, confirmó que recibió propuestas de dinero e incluso de una casa por parte del actual ministro del Interior, Lorenzo Lezcano (quien en esa ocasión era viceministro de Seguridad), para que se culpe a sí mismo por el asesinato de Quintana. Esto lo dijo ante el fiscal Hernán Galeano y de su abogada, Selva Rodríguez.
“Me ofrecieron varias cosas, pero la versión no se cambia, no se oculta, la verdad es verdad”, resaltó Florentín.
El uniformado también ratificó que recibió la orden de ingresar al PLRA del mismo comisario Amado Cantero. “La Policía Nacional es órgano no deliberante, obediente, todo es bajo orden. Yo solo cumplí con mi deber”, afirmó.
Por otra parte, Florentín manifestó que su camarada Arnaldo Andrés Báez (imputado por coacción) fue quien realizó el disparo que acabó con la vida de Rodrigo.
En tanto, el ex director de la Primera Zona Policial, Prudencio Burgos, ordenó supuestamente que abandonen el Congreso para reforzar el pelotón.
En cuanto a si escuchó una llamada telefónica entre José Ortiz, gerente de Tabacalera del Este SA, y el comisario Amado Cantero, se limitó a expresar que vio que su superior estaba hablando por teléfono y por radio frecuencia, pero no pudo precisar de quién se trataba. Es decir, no quiso dar nombres.
Florentín había sido notificado en otras cinco ocasiones, dos veces se abstuvo de declarar y en las tres restantes pidió suspensión, según comentó Galeano.
Esta causa ya tuvo cinco fiscales que fueron recusados.
Sotelo declaró el viernes 11 de agosto
El ex comandante de la Policía Críspulo Sotelo declaró el viernes pasado en calidad de testigo ante el fiscal Hernán Galeano; sin embargo, la misma audiencia se realizó de forma hermética y secreta.
El ex hombre fuerte de la Policía confirmó que recibió comunicaciones telefónicas por parte del presidente Horacio Cartes, Tadeo Rojas, José Ortiz y Luis Canillas, asesor jurídico de Yacyretá, que saltaron en el cruce de llamadas y que fueron publicados por los medios de prensa.
Sin embargo, también añadió que muchas de las llamadas no ingresaron, ya que el sistema telefónico estaba colapsado.
“Hubo una preocupación de una persona que le llamó en carácter de amigo y no sabía como civil cómo podría colaborar”, puntualizó el fiscal.
Se trataría de Ortiz, a quien Sotelo llamó primeramente tras la muerte del joven liberal y quien supuestamente maneja la Policía desde las sombras.
Finalmente, el interviniente afirmó que va a analizar si llama a declarar a Ortiz y a Lezcano.