El pueblo azulgrana preparó la fiesta, bailó y gozó con la clasificación a semifinales del Ciclón de barrio Obrero que vuelve a estar en esta etapa de la Copa Sudamericana siete años después, al vencer anoche 2-0 al Deportivo Independiente.
Su rival en semifinales saldrá del ganador de la serie entre Nacional de Medellín y Coritiba, que esta noche definen en Colombia el partido de vuelta. La ida fue de 1-1.
contagiados. El temporal que azotó un día antes la capital contagió al sentimiento azulgrana que fue un vendaval, que no dejó ningún espacio en el estadio Defensores del Chaco, que estaba repleto desde el domingo pasado, por las entradas agotadas.
La gente no paró de cantar en la gradas, como hace mucho no lo hacía y fue el primer empuje para la tenacidad de los jugadores.
Arranque equilibrado. Cerro inició con mesura, pero a medida que transcurrió encontró su camino y el primer pudo haber sido del uruguayo Álvaro Pereira, que por milímetros estuvo en fuera de juego.
El ídolo del momento que tiene Cerro encontró el tanto de apertura a los 33 minutos tras un centro de la derecha, desviado por Rodrigo Rojas y Cecilio Domínguez colocó encima del arquero.
Cuatro minutos después una jugada polémica en el que nuevamente Cecilio estaba en offside, pero un jugador del DIM punteó la pelota hacia atrás y el delantero colocó magistralmente. El árbitro argentino Mauro Vigiliano anuló luego de casi tres minutos y ordenó un tiro libre.
En la complementaria Cerro manejó y nuevamente la asociación Rodrigo Rojas hizo estragos, un penal Cecilio que el mismo cambió por gol. Pudo haber sido más, pero el gozo del pueblo fue completo por otra oportunidad de conquistar un título internacional.
El partido de ida de semifinales será entre el 1 y el 3 de noviembre y la vuelta será entre el 22 y el 24.