En la sede del Parlamento se conformó ayer por primera vez, desde que los campesinos de la Coordinadora Nacional Intersectorial llegaron a Asunción, una mesa de diálogo con representantes del Poder Ejecutivo. No obstante, los campesinos se retiraron antes y decidieron declarar un cuarto intermedio porque no tuvieron respuestas concretas, dijo el dirigente Luis Aguayo.
Participaron de dicha reunión, además de los dirigentes campesinos, la ministra de Hacienda, Lea Giménez; el ministro de Agricultura y Ganadería, Juan Carlos Baruja; el presidente del Banco Nacional de Fomento (BNF), Carlos Pereira; el presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Fernández Valdovinos; la presidenta del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH), Amanda León; el presidente del Congreso, Fernando Lugo, y senadores del Frente Guasu, ANR, PLRA y Unace.
Jorge Galeano, dirigente campesino, dijo que se solicitó a todos los representantes de las diferentes instituciones que asistieron al encuentro la aprobación de dos proyectos de ley. Por un lado, el que declara emergencia nacional para la reactivación de la agricultura familiar campesina y, el otro, el que plantea un subsidio en lugar de la condonación de deudas. Según Galeano, solamente faltan los votos oficialistas para aprobar ambos proyectos.
“Declaramos un cuarto intermedio manifestando nuestra predisposición para sentarnos a hablar, no tenemos aún respuesta, por eso nos retiramos. Mientras tanto, la movilización continúa por tiempo indefinido”, agregó Aguayo.
La vocera por parte del Gobierno fue la ministra Lea Giménez, quien dijo que esta primera vez se limitaron a escuchar las propuestas que serán estudiadas con los técnicos. No obstante, reiteró que no hay fondos para un subsidio. Tampoco hay un plazo para presentar los resultados de dichos análisis, pero prometió que sería en la brevedad. “Hay que considerar todas las alternativas. Todavía no se decidió nada”, añadió.
Antecedentes. Los campesinos llegaron a Asunción desde diferentes puntos del interior hace una semana y media. Se movilizaron en protesta al incumplimiento del Gobierno al acuerdo firmado en abril del 2016, en el cual se comprometió a comprar las deudas de los labriegos a través del BNF. Se compró por casi G. 5.000 millones, que representa una mínima parte en comparación con lo estimado, que asciende a USD 22,8 millones en deudas con bancos privados. Esta vez los campesinos plantearon nuevamente la condonación de deudas en principio, pero esta propuesta se dejó de lado y se intenta ahora negociar un subsidio.