24 abr. 2024

Aventura extrema en IPS: ¡Sillas de ruedas rotas y sujetadas con sonda!

Familiares de los asegurados deben peregrinar en el Hospital Central de IPS en busca del incómodo móvil para trasladar a sus pacientes de un piso a otro. Un solo herrero se encarga de las reparaciones.

Falencias.  Está silla de ruedas presenta un aspecto deteriorado con el tapizado destruido.

Falencias. Está silla de ruedas presenta un aspecto deteriorado con el tapizado destruido.

Eterna peregrinación. Los asegurados de la tercera edad sufren diariamente porque son trasladados en sillas de ruedas que se encuentran en mal estado en el Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS). El centro de referencia recibe diariamente a un promedio de 15.000 personas, entre ellas a muchos ancianos que requieren de un equipo para el traslado por el edificio que cuenta con nueve pisos.

Tapizados rotos, ruedas desinfladas o sin goma, frenos descompuestos, el posapie en algunos casos es reemplazado por mangueras de suero o sonda, así son las sillas de ruedas que están disponibles en la previsional para más de 1.300 pacientes internados.

El calvario de los familiares del enfermo se inicia cuando llegan al Hospital Central porque deben buscar alguna silla que esté disponible, caso contrario deben esperar que se desocupe. El requisito es dejar la cédula de identidad. En la zona de internaciones, el acompañante peregrina pieza por pieza para preguntar si hay alguna desocupada.

El enfermo generalmente requiere ser trasladado a laboratorio, a imágenes o actualmente a un baño habilitado, teniendo en cuenta que se están reparando los sanitarios.

La odisea está en el orden del día. Las sillas de ruedas en cada servicio son escasas, por lo que los familiares deben ingeniarse para llevar a sus enfermos, si no hay sillas de ruedas la opción es la camilla. Los asegurados se quejaron por la situación y piden una mayor provisión del elemento, así como la reparación correspondiente.

“Tenés que buscar silla por todas las salas. Para hacer estudios a veces no se encuentra y te tienen que llevar en camilla. Si necesitás para ir al baño las enfermeras no ayudan y te dicen que uses chata y listo”, se quejó una de las aseguradas que prefirió el anonimato porque acompaña a un enfermo que está internado desde hace semanas.

REPARACIÓN. El Departamento de Mantenimiento del Hospital Central es el encargado de realizar las reparaciones generales de los utensilios. Entre ellos, los asientos de metal que actualmente también se encuentran en mal estado, las sillas de ruedas, las luces, los aires acondicionados y otros.

Un solo herrero para realizar las reparaciones dispone actualmente el Hospital Central, otro se jubiló recientemente. El arquitecto Augusto Alcaraz, jefe de Mantenimiento, explicó que no dan abasto para realizar todas las reparaciones, pero que trabajan intensamente.

“Son de mala calidad, nosotros intentamos reparar. Con un solo herrero, a veces se repara. Si es fácil se repara rápido. Implica soldar o comprarle una rueda nueva. Se descomponen rapidísimo por el sobreuso”, comentó el arquitecto Alcaraz.