La película The Post cuenta la historia de Katharine Graham, la primera directora mujer de un diario (The Washington Post), y la decisión que debió tomar a inicios de 1970 junto con su editor jefe Ben Bradlee, sobre publicar o no papeles secretos del Pentágono relacionados con la gestión de cuatro presidentes norteamericanos sobre la guerra de Vietnam.
Graham se quedó con la administración del diario tras la muerte de su marido y debió abrirse paso en un mundo dominado por hombres, donde las decisiones de las mujeres en el manejo de los negocios eran menospreciadas.
Cuarenta y ocho años después, si bien hay más mujeres en cargos de poder, los medios de comunicación aún siguen siendo administrados por hombres.
La hermana del presidente de la República, Sarah Cartes, tuvo un breve paso por la administración del diario La Nación, mientras que Natalia Zuccolillo está asumiendo tímidamente el mando del conglomerado de medios del Grupo Zuccolillo, pero su padre, Aldo, continúa marcando la agenda de los medios.
La dirección periodística o jefaturas de Redacción siguen siendo mayoritariamente otorgadas a hombres. Si bien las jefaturas de secciones tienen un mix, en la mayoría de los casos los hombres continúan ganando casi el doble salario por el mismo trabajo que realizan las mujeres.
En el caso de la sección Deportes, no hay mujeres dirigiendo este departamento ni tampoco cubriendo los principales clubes de Primera División en medios de comunicación de alcance nacional. Y aquellas que realizan el trabajo de campo no alcanzan a ser ni diez personas. De relatoras de fútbol ni hablar, y tampoco son las principales conductoras de programas deportivos.
El enfoque y desarrollo de los temas, tanto en las portadas de los diarios como en las páginas interiores, continúan mostrando el marcado machismo.
Según una encuesta publicada por el Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), en marzo del año pasado el 72% de las mujeres periodistas se sintieron acosadas en su lugar de trabajo alguna vez.
La construcción de temas relacionados con el respeto a la mujer depende mucho del enfoque que los medios les den a las noticias. Por ello, es necesario que quienes tienen en sus manos definir los temas que se publican en los medios de comunicación entiendan que estos deben estar orientados a construir una mejor sociedad para las mujeres.
Una de las primeras medidas es acabar con la cosificación de la mujer en las tapas de diarios y páginas deportivas, donde se resalta su cuerpo y no sus logros deportivos, culturales o científicos.