Estas resoluciones debían entrar en rigor desde el 1 de enero de este año; sin embargo, por unanimidad, el nuevo consejo directivo entendió que existen exigencias que deben corregirse porque son de cumplimiento imposible para las entidades solidarias.
“El marco regulatorio y nuevo plan de cuentas quedan suspendidos tras las quejas recibidas a nivel nacional. Abrimos una mesa de diálogo para adecuarlas a la realidad del sector con técnicos especializados para sacar un producto ajustado a la realidad”, destacó en conferencia de prensa.
inaplicable. Por su parte, Pedro Loblein, miembro del consejo directivo del Incoop, señaló que, tras un análisis sobre el alcance de las resoluciones, notaron que existe un alto porcentaje de cooperativas que no iban a poder cumplir con las exigencias.
“Tenemos que ser flexibles y dar el tiempo a las entidades para adecuarse. Las debilidades para la aplicación de esta norma no solo están en las cooperativas; dentro mismo del Incoop no hay suficiente capacidad para llevar adelante el control que exige este marco”, admitió.
También se derogó un marco regulatorio para cooperativas en general, que a criterio de las nuevas autoridades integraba a todos los sectores y generaba mucha confusión.
“Cuando uno leía el alcance de la resolución notaba que afectaría a las cooperativas de producción y al sector de otros tipos de cooperativas. Esa resolución si hoy ven ya no existe, pues fue derogada”, anunció.
Lo que las nuevas autoridades del ente regulador comenzarán a trabajar es con una regulación específica para cada uno de los sectores: ahorro y crédito, producción, otras cooperativas y las centrales cooperativas.
Los miembros del consejo son: Nilton Maidana, del sector de Ahorro y Crédito; Simona Cavazzutti, por las cooperativas de producción; Blas Molinas, de otros tipos de cooperativas, y Pedro Loblein, por la Confederación Paraguaya de Cooperativas (Conpacoop).