El arzobispo de Asunción, que tiene a su cargo la coordinación total de la visita del Santo Padre, tiene un sueño. En la cuadra colorida de Palma, monseñor Edmundo Valenzuela confió ayer en el Día de la Independencia que la visita de Francisco al país no tiene que quedar como una simple alegría momentánea, una euforia efímera o un sentimiento pasajero.
“No queremos que se adore al Papa, eso significaría un craso error, iría contra todo lo que es el espíritu de la religión católica”, indicó el hombre clave en la organización de la segunda cita de un Pontífice en Paraguay.
La Iglesia paraguaya pretende que la feligresía entienda muy bien que el Papa pisará suelo guaraní con el fin de “evangelizar anunciando a Jesucristo, nos va a insistir en nuestro sentido misionero de transmitir y de vivir la fe”.
En la óptica del arzobispo de Asunción, los preparativos para el encuentro con el religioso de origen argentino están muy bien encaminados con relación a la organización de la cita con el Santo Padre en Ecuador y Bolivia.
“Nosotros estamos cien años luz adelantados”, expresó y presumió que Paraguay ya se movió desde enero con la creación de la comisión central integrada por miembros de la Iglesia y autoridades del Estado.
La gran cruzada que se impulsa en las parroquias y capillas en la actualidad es juntar los 60.000 servidores necesarios para cubrir todos los actos centrales con el Pontífice previstos en Ñu Guasu, Caacupé y la Costanera. En estos puntos, los servidores tendrán la misión de hacer cordones para el paso de Francisco, principalmente a la hora en que suba al papamóvil. (ver infografía)
actividades. El hecho de que Francisco visite el país desde el viernes 10 a las 15.00 hasta el domingo a las 19.00 es un privilegio, según el arzobispo Valenzuela. “El Papa quiere vernos, sabe muchas cosas del Paraguay, por eso vamos a tener la posibilidad de encontrarnos masivamente con él en Ñu Guasu y también en Caacupé ese fin de semana”.
La comisión central que organiza la visita del Pontífice prepara más actividades de preparación en los siguientes 50 días.
La próxima gran actividad se realizará en el Defensores del Chaco el 5 de junio, a las 18.00, con una asistencia estimada de 20.000 personas de todas las localidades del país. Los religiosos apuntan a acentuar la “formación espiritual en las parroquias para que la cita con Francisco no quede en lo folclórico, en el vyroréi, en el sentimentalismo o en el aplauso sin responsabilidad”, aclaró el arzobispo.