El Auriazul (54 puntos), en la última fecha como mínimo deberá empatar con Gral. Díaz para clasificar, de perder y ganar Capiatá (51) a Nacional, quedarán empatados y deberán ir a un partido extra por el último lugar para la Sudamericana.
En el juego disputado en Capiatá, el equipo de Rivera comenzó bien. Tuvo el control del balón y buena circulación, ante un rival descendido que jugaba por su orgullo y el honor, sin mucha presión.
Deferencia. Luqueño tuvo varias llegadas hasta el arco rival, pero sin la precisión para abrir el marcador. Casi al final de la primera fracción, Guido Di Vanni, de cabeza, anotó para el 1-0 a favor de la visita.
Sorprendió. En la complementaria, Luqueño se relajó y San Lorenzo sorprendió con dos sucesivos goles y pasó al frente con goles de Gerardo Arévalos y Osvaldo Romero.
El Auriazul cayó en imprecisiones, sumadas al nerviosismo y ya no pudo desplegar su fútbol de la primera etapa.
San Lorenzo, a pesar de quedar con 10 por expulsión de Trombetta, dispuso de varias ocasiones para liquidar el juego, pero Arnaldo Giménez salvó en tres ocasiones. Cuando el partido se iba, Esteban Ramírez, con un potente disparo, marcó la paridad 2-2.