EEUU conmemoró ayer el ataque japonés sobre Pearl Harbor que hace 75 años traumatizó a un país que se creía lejos de la II Guerra Mundial y que hoy, tras décadas de amistad con Japón, ve aquella tragedia como una herida casi cerrada. Ya solo quedan 5 supervivientes del ataque al acorazado USS Arizona, y que hace 75 años se convirtió en una ratonera donde fallecieron cerca de mil marinos, la mayor tumba de aquel día, que acabó con la vida de más de 2.400 soldados. Cuatro de los supervivientes del USS Arizona asistieron a una ceremonia de recuerdo en la isla de Oahu (Hawái), mientras que otros ancianos testigos de esa mañana del 7 de diciembre de 1941 acudieron a una ceremonia en el Monumento de la II Guerra Mundial en el corazón de Washington. efe