La difícil situación por la que atraviesa el comercio fronterizo resulta preocupante para el Centro de Importadores del Paraguay, por lo que considera que se debe reactivar lo antes posible para que recupere la competitividad perdida frente al de los países vecinos. Para lograr este objetivo, se precisan de aranceles bajos que favorezcan el negocio de la reexportación, sostiene Elzear Salemma, presidente del gremio importador, aunque con la condición de que Asunción también sea incluida como ciudad fronteriza y se beneficie con los mismos porcentajes de impuestos, para evitar crear dos países paralelos.
“Nosotros sentimos una gran preocupación por la situación de la frontera. Creemos que el comercio fronterizo debe reactivarse de alguna manera en Paraguay. Si el camino es el de reducir impuestos, pues tenemos que avanzar en esa dirección, para ser nuevamente competitivos, pero sin descuidar a Asunción”, remarcó.
Sin culpas. Salemma sostiene que no existen motivos para sentir ningún tipo de culpa por el negocio de reexportación, que es un método muy común en el mundo y adoptado por otros países y ciudades altamente competitivas en el mundo como Taiwán, Miami, e incluso, Panamá, por lo que, a su entender, es necesario que en Paraguay también se le dé todo el impulso necesario.
“Pero para eso, se necesitan aranceles muy bajos que puedan ser pagados y que impregnen de competitividad al país y facilitar todas las medidas paraarancelarias. Pero lo que nosotros queremos agregarle a todo esto es que haya igualdad de condiciones. Asunción también es una ciudad fronteriza. El turismo de compra en Paraguay comenzó en la capital. Años atrás había filas de buses estacionados, hoteles llenos y todos sobre calle Palma haciendo compras”, insistió el empresario.
Salemma señaló que es fundamental para el país recuperar la competitividad perdida, otorgando precios ventajosos a 10 ítems principales, como perfumería y bebidas, entre otros. “Entonces, lo que queremos es igualdad de derechos, para evitar que Ciudad del Este se pague 4% de impuestos y en Asunción el 10%. Tiene que haber igualdad para todos, porque de lo contrario causará mucha confusión. Si logramos eso, no dividiremos al país en dos países”, dijo.
El titular del CIP indicó que este tema debería tratarse sin pérdida de tiempo entre las autoridades y los gremios afectados, para tratar de salvar al comercio fronterizo. “Nosotros habíamos solicitado una audiencia con el Ministro de Hacienda, nos recibió y en ese encuentro se acordó conformar una comisión en la que participará un representante de cada gremio, incluyendo a los que, lógicamente, están proponiendo este proyecto de régimen tributario, que son los empresarios de frontera. Las reuniones deberían empezar esta semana, tendrían que haber comenzado ya, no hay mucho tiempo, si se le ayudará a la frontera, tiene que ser ya, después será tarde”, alegó.
El Centro de Importadores del Paraguay sostiene que el comercio fronterizo debe reactivarse ya, para que mantenga su competitividad, pero solicita que la capital sea incluida como ciudad de frontera.
Comerciantes de CDE buscan preservar los empleos
La Cámara de Comercios y Servicios de Ciudad del Este solicitó derecho a réplica por a nota “Capasu: Relajar sistema fiscal de frontera es otro golpe a los formales”, publicado el domingo 30 de mayo en la sección Economía de Última Hora. En la carta, alega que el Proyecto de Ley de Régimen Fronterizo tiene por objetivo seguir manteniendo la competitividad del comercio fronterizo y preservar las fuentes de empleo que genera. El gremio resalta que se incluye también dentro de este régimen a Asunción, para que sea considerada como ciudad fronteriza. “Además, podremos lograr la plena formalización tan anhelada, contrarrestando la ilegalidad y aumentar la recaudación del Fisco”, indica. Añade que el gremio demostró que se podría recaudar un 30% más que en 2019, en base a un arancel total del 5% sobre las mercaderías importadas para su venta al exterior.