AFP
SAO PAULO - BRASIL
Miles de fieles asistieron ayer a la inauguración en Sao Paulo del mayor templo católico de Brasil, con capacidad para 100.000 personas, con una misa a cargo del sacerdote Marcelo Rossi, considerado un popstar en el país con más católicos en el mundo.
"¡Viva Jesucristo, viva nuestra señora madre de Dios!”, exclamó el sacerdote al iniciar la multitudinaria liturgia con que se inauguró el megatemplo Santuario Mae de Deus (Theotokos), uno de los mayores del mundo y aún en construcción después de ocho años de iniciados los trabajos.
La enfervorizada multitud coreaba canciones, ondeaba pañuelos blancos y aclamaba la presencia del sacerdote, un mediático religioso que ha vendido millones de discos, DVD y libros y es seguido día a día en sus programas de radio y televisión. Miembro del movimiento de Renovación Carismática, surgido a fines de los años 1960 en el seno de la Iglesia Católica, Rossi convoca a decenas de miles de personas a las animadas liturgias que celebra.
30.000 metros cuadrados El templo se levanta en un antiguo terreno industrial de 30.000 m2. Según la oficina de prensa de Rossi, 20.000 personas caben en la zona cubierta inaugurada ayer, de 8.500 m2 de superficie, y otras 80.000 podrán ubicarse en el exterior, pero esta parte aún no está terminada. “Cuando esté terminado, será el mayor templo de Brasil”, celebró el llamado padre Marcelo a los periodistas una vez concluida la celebración, asegurando que el espacio disponible ayer “se hizo pequeño” para la masiva concurrencia.
“Este lugar es maravilloso. Llegué acá a las 5 de la mañana y estoy cansada, pero en el nombre de Jesús seguiré esperando”, dijo Rita Carlo, una anciana que junto a su nieto esperaba la misa. “Sigo hace años al padre Marcelo. Tengo sus libros, sus discos. Él es un hombre bendecido por Dios”, añadió Claudia de Azevedo, otra de las miles de participantes de la ceremonia. “Cuando lo escucho, lo veo, siento mucha paz”, dijo de su lado Nazira Nardoto, una mujer de mediana edad que viajó 10 horas desde el interior del país para asistir a la misa.
Mayor en capacidad que el Santuario de Nuestra Señora de Aparecida, también en el estado de Sao Paulo, que puede acoger a unas 45.000 personas, el recién inaugurado templo Mae de Deus (Madre de Dios) es similar en capacidad a los enormes recintos evangélicos que han surgido los últimos años en Brasil, siguiendo el aumento de los fieles de ese credo.
Sólo el terreno costó 3 millones de dólares, según declaró Rossi a los medios locales. El diseño estuvo a cargo del arquitecto brasileño de origen japonés Ruy Ohtake, quien dijo que este espacio “representa la celebración de la misa contemporánea, alegre, vital y democrática”.