Con los mismos dramas de infraestructura reabren sus puertas hoy las instituciones educativas públicas, con directivos y docentes que vuelven a sus quehaceres en la etapa de preclase.
Datos oficiales indican que en todo el país se registran 12.000 salas de clase en mal estado, de las que 200 están en riesgo de derrumbe. Estos 200 espacios no podrán ser ocupados cuando arranque el año lectivo el lunes 20 de febrero.
Los directores de escuelas y colegios lamentan que en estas épocas la situación sea siempre la misma. “Nosotros exigimos también, como cada año, que las escuelas tengan la inversión que se necesita”, apuntó el titular del Sindicato Nacional de Directores (Sinadi), Miguel Marecos.
Sin recursos. El Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) no cuenta con presupuesto de infraestructura para este 2023, explicó la viceministra de Educación Básica, Alcira Sosa.
“Esperamos que municipios y gobernaciones inviertan lo que tienen disponible para invertir también en sus comunidades educativas”, afirmó.
Recordó que con lo que sí cuentan es con G. 3.600 millones que son parte de la donación de la Unión Europea (UE) para mejoras de infraestructura.
Actualmente, los fondos no son desembolsados debido al impasse con la Cámara de Diputados, que dio media sanción a suspender la donación por supuesta “ideología de género”.
El director general financiero del MEC, Óscar Stark, manifestó que esperan la llegada del embajador de la UE tras vacaciones para retomar el contacto y contar con este recurso.
Los fondos también sirven para otros rubros como la compra de materiales pedagógicos, kits escolares y vouchers para 47.000 jóvenes de colegios técnicos.
Prioridad. Para los requerimientos prioritarios, se precisan por lo menos USD 400 millones, pero en total lo necesario son USD 1.000 millones para resolver todo lo relacionado con infraestructura, siempre de acuerdo con los datos del Ministerio.
“Tenemos algunas aulas ya clausuradas en el 2022 y que no van a estar habilitadas para febrero, pero es el caso de solo las más graves, las condiciones de iniciar el año están vigentes en general”, comentó la viceministra Alcira Sosa.
Para el caso de las inhabilitadas, que rondan las 200, se prevé que den clases en salas de otros cursos que tengan turnos opuestos, en iglesias del barrio o locales municipales. Agregó que solo algunas pudieron ser reparadas para este 2023.
1.300.000 estudiantes se espera que retornen a clases en 7.500 establecimientos públicos, desde el 20 de febrero.
1.000 millones de dólares se requieren para solucionar los dramas de infraestructura, según último análisis del MEC.
Las clases inician con normalidad en todo el país. En caso de aulas no habilitadas, se usarán locales alternativos. Alcira Sosa, viceministra del MEC.
