Es cierto, el Ciclón está relegado y sin posibilidades de ganar el título, además se presenta con su “paralelo” para afrontar el compromiso; claro, con jugadores de muy buen nivel en tiempos idos y otros que esperan dar el salto.
Olimpia, sin embargo, está a tres puntos de la punta y sigue manteniendo la posibilidad de llegar al título en este tramo final del torneo Clausura.
LA GRAN CITA. A las 16.45 es la cita de la fiesta del fútbol en el Defensores del Chaco.
A priori y no es un descubrimiento, es el Decano el de mayor necesidad de los puntos. Si no gana los tres, implicará no aprovechar la oportunidad de sumarse al lote de punteros pensando en un título después de mucho tiempo.
También el franjeado está con bajas importantes por las ausencias de figuras de la talla de Carlos Bonet y Rodrigo Rojas, quienes están de gira con la selección nacional.
Carlos Kiese, pese a todo, pone todo lo que tiene, porque es perentoria la victoria, no por el simple hecho de tumbar a su eterno adversario, sino porque la punta es el premio mayor, quedando intacta la chance de campeonar.
PURO FUEGO. A la temperatura elevada por las condiciones climáticas, se sumarán las ganas e intenciones de los dos equipos en pos de la victoria. Aún cuando al Ciclón no representará hechos puntuales y valiosos con la suma de los tres puntos, ganar al rival eterno es como para cortarle la ilusión de seguir pisándole los talones a los punteros.
Si eso ocurre, es como para un efusivo festejo por parte de los azulgranas. Para los franjeados, ganar a o ganar es el gran compromiso.
Las inesperadas derrotas consecutivas de Libertad y Nacional hacen que el torneo se vuelva candente y el clásico será más trascendente que nunca.
La fiesta del fútbol es en el Defensores del Chaco. La pelota entra en juego desde las 16.45. Antes, cuando los portones de acceso se abran, desde las 14 horas, la conducta de los aficionados debe ser ejemplar. Las autoridades, policiales y judiciales, están alertas y llevan adelante una planificación para brindar la máxima seguridad a los aficionados que van a concurrir al gran acontecimiento deportivo.
El comportamiento de los hinchas será controlado no solamente camino al ingreso al estadio, sino también luego de la culminación de lo que se presume será la fiesta máxima del fútbol paraguayo.
Luego del final del encuentro, sea cual fuere el resultado, será la hinchada de Cerro Porteño la primera en abandonar el estadio. Luego de unos treinta minutos, lo harán los componentes de la parcialidad olimpista.
Se habilitaron 23.500 boletas para el juego.
