El Gobierno de China reunió a grandes tecnológicas y les advirtió que sufrirían consecuencias se interrumpen sus ventas a ese país, informaron.
La reunión se produjo luego que el presidente Donald Trump colocó al gigante chino de telecomunicaciones Huawei en una lista negra que le impide acceder a ese mercado.
La decisión de Trump se basó en razones de seguridad nacional y amenaza los negocios de Huawei, a la que Washington considera sospechosa de espiar para Pekín.
En la última semana, el Gobierno chino reunió a ejecutivos de las firmas estadounidenses Dell y Microsoft y de la surcoreana Samsung, entre otros, para advertirles que cualquier reducción de sus operaciones en China generará represalias, reportó el diario The New York Times.
A las firmas estadounidenses se les dijo que “la determinación de Trump de privar a las compañías chinas de tecnología estadounidense ha trastocado la cadena mundial de suministros y que las empresas que sigan esa política podrían enfrentar permanentes consecuencias“, informó el periódico.
A las empresas con sede fuera de Estados Unidos se le dijo que no serían penalizadas mientras mantengan sus negocios normalmente, según el diario.