“Existe una caída real de la economía en Brasil y somos un reflejo de eso. La economía se achica; de todas maneras es muy agradable volver a ver la reactivación de parte de la gente”, refirió Juan Vicente Ramírez, vicepresidente de la Cámara de Comercio y Servicios local.
De 40.000 empleados contratados que tenían las tiendas del microcentro, quedaron sin empleo por lo menos 30.000 durante el cierre de frontera y hoy están contratando unas 10.000 personas para acompañar la vuelta a la normalidad. “Estamos prácticamente con el 20% de los contratados en este momento, tenemos que ir ampliando gradualmente; con mucha cautela para asumir los compromisos”, dijo.
Un factor a tener en cuenta es que el real brasileño está bastante devaluado. Insistió que a fin de mes van a realizar una evaluación seria. “Estamos todavía con el entusiasmo de la reciente reapertura, que hace que venga mucha gente, pero todavía no podemos decir cómo estamos económicamente”, sostuvo.
Antes de la pandemia cada dólar costaba entre 4,00 a 4,80 reales; hoy está 6 reales por dólar. “Vemos que en Brasil en reales los precios están bastante competitivos en rubros como televisores. Allá es más barato que acá. Estuve viendo también que electrodomésticos tienen precios bajos en Brasil, vamos a ver si mantienen y esperamos poder acompañar todo eso”, ejemplificó.
GRADUAL. Ramírez dijo que volver a la normalidad será gradual y que octubre y noviembre suelen ser meses de muy buen movimiento comercial, por la llegada de fin de año y las promociones de los comercios. “Imagino que vamos a volver a hacer el Black Friday y eso mueve bastante la economía”, arriesgó.
En cuanto a stock de mercaderías, recordó que al inicio de la pandemia estaban con mucho inventario, que se fue vendiendo.
Hubo algunas importaciones en ese periodo, por los productos de alta demanda que habían terminado, según mencionó.
Aprovechar el feriado
Ramírez indicó que seguramente se tendrá mucha afluencia a partir de ahora hasta el feriado del 2 de noviembre, muy marcante en Brasil, porque hay mucho turismo. “Creo que los hoteles van a estar rebasados para esa fecha”, sostuvo.Volver a la nueva normalidad resulta muy saludable para esta localidad y para Foz de Yguazú. “Somos dos ciudades muy integradas, dependemos una de otra, y necesitamos de hacer compra del otro lado también para nuestro día a día y eso reactiva la economía interna”, dijo.