“El impulso de la reconstrucción se ha acelerado, se ha hecho más de lo que se ve a simple vista y ahora se necesitan todos los esfuerzos para expandir este impulso en el próximo año”, indicó en un comunicado la plataforma, que aglutina a las agencias del sistema de las Naciones Unidas, el Banco Mundial, la Unión Europea y la cooperación de varios países, entre otros.
Advirtió de que la recuperación tras un desastre natural de esta envergadura no se puede completar “en unos pocos años” y requiere soluciones “sostenibles”, por lo que el proceso de reconstrucción debe seguir siendo “por un tiempo” la primera de las prioridades del Gobierno.
El IDPG ha hecho un balance positivo de las labores de recuperación tras el seísmo, a pesar de que el organismo nepalí encargado del proceso anunció ayer que en los últimos dos años se han reconstruido apenas el 5 % de las propiedades afectadas.
“Sean personas reconstruyendo caminos peatonales de acceso a sus aldeas, trabajando para reabrir puestos sanitarios o gente abriéndose cuentas bancarias para recibir la primera parte de las ayudas gubernamentales de vivienda, hay mucho que merece ser celebrado”, opinó el IDPG.
La plataforma también reconoció que “hay gente y comunidades que todavía no han recibido ayuda y para las que el proceso de reconstrucción no ha ido lo suficientemente rápido”.
La Autoridad Nacional de Reconstrucción de Nepal (NRA), a cargo de la normalización del país tras el seísmo, informó ayer de que de las 626.695 viviendas afectadas apenas 22.234 han sido reconstruidas hasta la fecha, mientras que los trabajos están en marcha en 49.681.
El terremoto del 25 de abril de 2015 y sus posteriores réplicas dejaron 9.000 muertos y más de 21.000 heridos, con unas pérdidas evaluadas en aquel momento en 7.000 millones de dólares.
