El joven mimado del presidente Horacio Cartes, el dirigente colorado Raúl Sánchez (h), sorprendió ayer con sus declaraciones al decir que las bases del movimiento Honor Colorado (HC) están preocupadas por la posible candidatura del ministro de Hacienda, Santiago Peña.
“Estamos preocupados. El presidente dijo que iba a consultar a las bases y hasta ahora esperamos que lo haga porque queremos decirle que vemos con dificultad vender este candidato a la dirigencia. Es un liberal y como militante debo decir lo que pienso”, sostuvo el seccionalero de la 24.
Raulito, funcionario de Yacyretá puesto por el propio mandatario en una dirección y con un salario de mas de G. 11 millones, expresó que los ánimos en el oficialismo, sobre todo en las bases, están caldeados porque hubo fugas importantes, como la del vicepresidente Juan Afara y el titular de Diputados, Hugo Velázquez. “La figura del vicepresidente es fundamental al igual que la de Velázquez”, advirtió.
Manifestó que el Partido Colorado cayó en 2008 porque no se consultó a las bases si se está o no de acuerdo con la candidatura que se había elegido, refiriéndose al ex presidente Nicanor Duarte Frutos y su ficha de entonces, Blanca Ovelar.
Aseguró que el presidente Cartes tiene “mucha sabiduría” para resolver muchas cosas, pero está claro que la candidatura de Peña “deja mucho que desear, lo que no quiere decir que no lo respetemos como técnico, pero como político está difícil”.
Liberal. Sánchez expresó que “un liberal suele votar por un colorado, pero es difícil que un colorado vote por un liberal”. Recordó que el ministro de Hacienda está afiliado hace apenas seis meses a la ANR pero que todos saben que en realidad es un liberal.
“No estamos en contra del presidente. Los verdaderos militantes y leales al presidente que defendimos su gobierno y defendimos la enmienda a capa y espada, somos los preocupados”, lamentó.
Gobernadores. Sánchez afirmó que los gobernadores, o al menos varios de ellos, son los responsables de hacerle creer al mandatario que la candidatura de Peña cayó bien a la dirigencia en los departamentos que recorrió porque los jefes departamentales buscan tener espacios en la Cámara de Diputados y, viceversa, algunos diputados quieren ser gobernadores.
Por su parte, Julio Vega, presidente de la Seccional 21, consideró a Peña como un “buen técnico”, pero que debe primar el deseo de la mayoría de elegir. “Nadie puede criticar su capacidad (de Peña), pero en nuestro partido hay muchos que llevan en cuenta la antigüedad y la militancia sobre todas las cosas, en este caso, nos estamos abriendo a un nuevo proyecto de trabajo y eso debemos evaluar”, insistió Vega.