25 abr. 2024

Stroessner manipuló la democracia para lograr eternizarse en el poder

El primer paso para la perpetuación en el poder lo dio Stroessner con una nueva Constitución, la de 1967. El segundo fue la enmienda del artículo 173 cuando suprimieron la restricción a la reelección.

Brigitte Colmán

bcolman@uhora.com.py

Cuando a Alfredo Stroessner se le acabaron las posibilidades de reelección puso en marcha la elaboración de una nueva Constitución. Reunida en el Teatro Municipal, una convención constituyente sancionó la conocida como Constitución de 1967, que, entre otras cosas, le permitía a Stroessner ser reelecto para un periodo más.

Al año siguiente ganó las elecciones como a él le gustaba, por “goleada": con un 79,80% de los votos. Lo mismo fue cinco años después cuando ganó con el 84%.

Pero llegó el año 1977 y con eso el fin de su mandato. Un artículo de la Carta Magna lo ataba de manos y pies: el 173, que le permitía solo una reelección; así nació la convocatoria para una nueva Asamblea Nacional Constituyente, que en marzo de 1977 estableció que el presidente de la República podrá ser reelecto, sin restricciones.

Stroessner ya llevaba más de dos décadas en el poder y al país todavía le quedaban 12 años más de paz y progreso, lo cual fue posible gracias a la enmienda del artículo 173, en aquel marzo de 1977. Finalmente en febrero de 1989, un golpe de Estado terminó con la dictadura más extensa de la historia política paraguaya. “Stroessner lo que buscaba era legitimidad, ya era un dictador, pero él buscaba esa legitimidad”, señala la historiadora Milda Rivarola. Y agrega que el dictador buscaba elementos para defender el régimen en el exterior, aunque internamente no cumpliese las normas.

En aquel momento, los norteamericanos presionaban a los dictadores, pero como temían que se repitiera lo de la Revolución cubana, se conformaban con que las dictaduras tuvieran un ropaje legal, explica Milda.

La Asamblea Constituyente se reunió el 10 de marzo, y el 11 se presentó la enmienda del artículo 173, ese fue el día en que Luis María Argaña proclamó que Stroessner era el alfa y el omega de la grandeza nacional, comenta el historiador Fabián Chamorro.

Señala asimismo que en aquel momento era mucho lo que estaba en juego, “estaba en pleno apogeo Itaipú y Yacyretá, con sus estudios de viabilidad, factibilidad, el hecho de la construcción, era mucho lo que estaba en juego en ese momento”.

Un detalle que aporta Fabián Chamorro es el hecho de que hoy se utilice el mismo eslogan que hace 40 años. “Es el mismo eslogan, que el pueblo decida; el primer manifiesto de las seccionales coloradas decía porque el pueblo lo pide y como el pueblo lo pide”.

Poco después de la enmienda, el 18 de abril del 77 se hace el lanzamiento de la reelección. Fue el primer acto por la reelección de Stroessner, y se realizó en Fernando de la Mora. Fueron oradores Chaves y Tomás Romero Pereira, apunta Chamorro, y agrega que entre los oradores aparecía un joven, Papi Sanabria Cantero, quien tras la caída de la dictadura fue enjuiciado y purgó una condena por malversación de fondos públicos.

Será cierto, después de todo, lo que escribía Marx, de que la historia se repite dos veces. La primera como tragedia, la segunda como farsa.