Los parlamentarios derechistas cuestionan la idoneidad de una veintena de viajes realizados dentro de Chile por Insulza, quien ayer renunció al cargo de agente ante la CIJ para así poder postularse como candidato presidencial por el Partido Socialista.
La iniciativa fue presentada por los legisladores José Manuel Edwards, Marcela Sabat y Paula Núñez, de Renovación Nacional (RN), y Andrea Molina, de la Unión Demócrata Independiente (UDI).
Según los legisladores, los viajes pudieron haber sido utilizados con fines políticos por Insulza, para impulsar su precandidatura.
Por ello, pidieron a la Contraloría aclarar si los fondos que financiaron esos viajes tuvieron su origen en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile.
“Tenemos 23 presentaciones, muchas (de ellas) fuera de Santiago, en horario laboral. Sería muy grave que una campaña presidencial, que todo el mundo conocía y que fue negada dos veces se hubiera financiado con dinero de la Cancillería”, apuntó Edwards.
Edwards consideró que el nombramiento en su día de Insulza -quien fue canciller de Chile y secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA)- fue un error.
“No fue razonable pedirle a un señor como Insulza que fuera agente, sabiendo que nos podía dejar botados (tirados). El señor (Evo) Morales podrá caernos mal, pero hay que respetar que se la ha jugado contra todos nosotros”, reflexionó.
“Se deben aclarar nuestras dudas; hay que dejar las dudas y cuestionamientos, y saber si con recursos de todos los chilenos se llevaron a cabo estas reuniones”, terció por su parte la diputada Paula Núñez.
Insulza fue nombrado por la presidenta Michelle Bachelet el 23 de noviembre del pasado año en sustitución de Felipe Bulnes, quien ostentaba el cargo durante la administración del conservador Sebastián Piñera. Insulza fue sustituido ayer por el diplomático Claudio Grossman.