El primer torneo y exposición de videojuegos en el aula del colegio Santa Teresita de Villa Hayes se realizó ayer en el local de la institución educativa del Bajo Chaco.
Participaron alumnos de 10 centros educativos de la zona, de la capital y Central. Incluso estuvieron representantes del colegio técnico San José de Clorinda, que incluyeron en sus proyectos un termo que ceba el mate con solo darle un toque al celular. Niños del Centro Educativo Los Laureles de Asunción llegaron también a la fiesta tecnológica, con proyectos en 3D.
Los alumnos de colegios públicos locales demostraron que pese a las precariedades que tienen en su educación, con las herramientas adecuadas pueden destacarse diseñando juegos a través de la programación, al igual que lo hacen en otros países.
Uno de los trabajos destacados en la víspera fue el juego Turismo en el Bajo Chaco, realizado por un grupo de alumnos de una comunidad indígena de Cerrito, de la escuela Padre Dominico Masi. “Che sy ovyaiterei ajapohaguere ko’ambae che escuela pe (Mi mamá está feliz porque hago esto en la escuela)”, comentó Eduardo Caballero, alumno del sexto grado de Dominico. Mientras, mostraba cómo su personaje se paseaba por las zonas turísticas del territorio chaqueño, saltando obstáculos al estilo de Mario Bros. Este programa se llevó el primer puesto en la categoría del segundo ciclo en 2D.
Método. En 2D o en 3D, los chicos de 10 instituciones crearon sus juegos para llevarlos al torneo. Las aplicaciones se hacen con programas como Construct 2, Kodu y Scratch, que se utilizan en el ámbito educativo en todo el mundo. “El presente son las tecnologías de la información y la comunicación, no podemos excluir a nuestros niños de esta realidad, ellos son precisamente el presente”, comentó la directora de Santa Teresita, Miguela Ojeda.
Este tipo de iniciativas en escuelas públicas van surgiendo mediante la autogestión de educadores. La fundadora de la escuela Dominico Masi, la hermana italiana Carmela, indica que el trabajo de los alumnos indígenas con la programación, demuestra que al darle las oportunidades correctas, no hay barreras para ningún chico.
Dificultades. En el colegio organizador de la jornada, el Santa Teresita, los jóvenes programan con 6 computadoras para 50 alumnos. No son equipos del MEC, sino de una telefónica privada que montó un laboratorio en el lugar. Recién ahora el ministerio adjudicó computadoras y un laboratorio móvil con 20 netbooks para el centro educativo. Siguen aguardando estos insumos informáticos.
“Queremos fomentar la programación didáctica con base en videojuegos y robótica, que puedan experimentar las nuevas técnicas en la educación”, comentó el coordinador del evento, el profesor de Informática Paulo Valdebenito. El educador expresó que los alumnos son de escasos recursos, no tienen computadores en sus hogares.
Queremos fomentar la programación en los niños. Todo está basado en la informática hoy.
Paulo Valdebenito, docente de Informática.
Me gusta programar, solo en la escuela tenemos computadora. En dos meses hicimos nuestro juego.
Eduardo Caballero, alumno de Cerrito.