El pasado viernes, a un alumno del 5° grado de la escuela Juan Ramón Dahlquist le entregaron una leche entera larga vida de 250 mililitros con fecha de vencimiento del 2017. El niño olvidó consumirla en el recreo y llevó la bebida sin abrir a su casa, donde su madre se percató de la irregularidad.
“Cuando llegué a casa me mostró mi hija, ella revisó cuando mi nieto iba a tomar, no abrimos, así mismo dejamos”, denunció en comunicación con Última Hora Isabelino Rodas, abuelo del chico.
Agregó que no accionará contra la institución educativa, porque no considera que sea culpa de los encargados de la casa de estudios, sí responsabiliza directamente al Ministerio de Educación y Ciencias.
Rodas se mostró preocupado por el hecho, ya que otros niños pudieron llegar a consumir el producto vencido.
Destacó que la intoxicación que causa consumir alimentos en este estado es grave, y afectaría más a niños de escasos recursos, quienes tienen poco acceso a un sistema de salud.
“Si el ministro no es capaz de arreglar las escuelas que se derrumban, que por lo menos controle lo que se le da a los alumnos en el recreo”, manifestó.
Las municipalidades y gobernaciones son las encargadas de gestionar la provisión de merienda escolar en las escuelas, a excepción de Asunción, donde es el MEC el responsable.
El programa tiene el objetivo de cubrir falencias alimenticias de niños de escasos recursos y ser guía de una buena alimentación.