25 jun. 2025

“Es un alivio para nosotros, pero el dolor lo llevaremos hasta la tumba”

Tras confirmarse que el cráneo hallado en Remansito pertenece a Cinthia Carolina Escobar Almada, la familia revivió el momento triste que les tocó vivir. El padre de la joven pide un castigo ejemplar.

Don Carlos Escobar tenía una corazonada de que el cráneo hallado por un pescador en aguas del río Paraguay pertenecía a su hija Cinthia Carolina Escobar Almada, asesinada el 21 de enero del año pasado. El padre de la víctima aseguró que la reconoció al mirar su dentadura. Pese al hallazgo, no tendrán paz de por vida, asumió.

“Es un alivio que nos trae a la familia porque vamos a darle cristiana sepultura, pero paz ya no tendremos, el dolor lo llevaremos hasta la tumba”, expresó el padre, quien sostuvo desde el fatídico día que el autor del crimen era la ex pareja de la víctima, Esteban Da Silva González, como sospecha la pesquisa.

CALVARIO. “Nosotros seguimos con el calvario, no termi- nan el sufrimiento ni la pesadilla porque el dolor de perder a una hija no tiene explicación. No le deseo a nadie, y espero que ya no suceda a ninguna familia. Estaremos más tranquilos cuando llegue el día de la condena del responsable del crimen y del cómplice”, manifestó contundente Escobar.

Don Carlos señala que su familia sufrió al enterarse del hallazgo debido a que rememoraron todo lo sucedido hace un año diez meses. “Pedimos que la Policía actúe, que atrape al prófugo, lo queremos ver tras las rejas y que cumpla una condena ejemplar”, solicitó.

Escobar dijo que en su carácter de militar retirado y persona instruida, cree que el cráneo de su hija fue arrojado al río hace 15 días. Aseguró que no estuvo flotando en el agua casi dos años.

INFORME. El odontólogo forense de la Policía Nacional, doctor Juan Carlos Zárate Rodríguez, encargado de la identificación, sostuvo que mediante la información obtenida a través de fotografías y el análisis de la dentadura pudieron confirmar la identidad de la mujer. El fiscal Jorge Figueredo informó que ya fueron solicitados estudios antropológicos de la pieza ósea y confirmó que el cráneo no presenta señal de lesiones durante el ataque fatal. Recordó que la causa de muerte fueron las heridas causadas con un cuchillo y, posteriormente, fue desmembrada y decapitada.

Según los antecedentes, Escobar Almada fue a la casa de un conocido de nombre Francisco Vera Domínguez, ubicada en el asentamiento San Roque, de Villa Hayes, a fin de adquirir y consumir, presuntamente, estupefacientes.

Luego llegó al sitio Da Silva y comenzaron a discutir, porque la mujer había decidido terminar con la relación porque el hombre la golpeaba.

En el sitio forcejearon y el hombre la habría golpeado, desfigurándole el rostro para impedir que saliera del lugar.

Supuestamente, en ese momento la ultimó con puñala- das en el pecho izquierdo y tórax, con la ayuda de su cóm- plice, Francisco Vera Domínguez, según la fiscalía.

Finalmente, decidieron borrar evidencias y deshacerse del cuerpo y procedieron a cercenarlo con un cuchillo, conforme a los datos de la investigación. El cuerpo de la víctima fue encontrado en una bolsa en el barrio Progreso de Villa Hayes, por vecinos de la zona. Sin embargo, la cabeza no fue hallada, hasta que el pasado lunes, un pescador de la zona de Remansito observó que un perro se entretenía con un bolsón.

Al acercarse y verificar su contenido, se encontró con la sorpresa de que se trataba de un cráneo envuelto en una bolsa de polietileno y restos de cabello. El hombre avisó a la Policía y en 24 horas identificaron a la mujer.

Cómplice se encuentra con paradero desconocido
Desde el violento crimen de Cinthia Carolina Escobar Almada, quien debía tener 31 años, desapareció del barrio el Progreso, de Villa Hayes, Francisco Vera Domínguez.
El hombre es buscado por participar del homicidio junto con Esteban Da Silva González, ex pareja de la víctima. El prófugo supuestamente fue a esconderse al lado chaqueño y hasta ahora la Policía no cuenta con pistas de su paradero.
La familia de Cinthia pide que sea hallado e imputado como el supuesto autor del homicidio doloso.
La precaria casa del prófugo presumiblemente fue la escena del crimen en donde los agentes hallaron ropas de la mujer con manchas de semen y sangre. También levantaron un cuchillo que sería el utilizado para desmembrar a la víctima.