Jorge Torres, presidente de la Comisión de Vendedores y Productores de Pohã Ñana del Mercado 4, comentó que desde hace unos días docenas de palmas ya fueron destinadas a distintas localidades del interior del país e incluso a ciudades argentinas cercanas a la frontera.
El pindó se vende desde 2.000 hasta 10.000 guaraníes, que varían de diseños desde los más sencillos para los niños hasta los más trabajados con ruda, romero y siemprevive, plantas medicinales que según el folclore ahuyentan la mala onda.
Los adultos son quienes más buscan compradores del pindó. Torres comenta que cada año notan que disminuye la venta, no por el costo del enramado, sino porque la gente va menos a la iglesia.
El Paseo de los Yuyos, ubicado en República Francesa c/ Pettirossi, espera hoy la mayor cantidad de compradores. La atención será continuada también el domingo, para aquellos que decidan a última hora iniciar la Semana Santa con el pindo ñemongarai en sus respectivas capillas o parroquias.