Ante esta situación, el agente fiscal Rogelio Ortúzar, que atiende la causa, pidió el procedimiento abreviado para los uniformados, quienes deberán comparecer a una audiencia preliminar.
Tanto el comisario Cardozo como sus subalternos se presentaron ayer ante el fiscal Ortúzar para prestar indagatoria en el caso. Los mismos se exponían a la imputación por persecución de inocentes. Sin embargo, al admitir su culpa en los hechos por los que están investigados, el fiscal Ortúzar pidió el procedimiento abreviado, que se admite en hechos que tienen una pena máxima inferior a cinco años, pero que suelen terminar con una condena de 2 años.
Ahora, el juez penal de Garantías tiene la potestad de condenar a los procesados durante una preliminar o, caso contrario, dependiendo de la gravedad, pedir que el caso sea elevado a un juicio oral.
Los policías deberán ser juzgados por simulación de un hecho, denuncia falsa, producción de documento de contenido falso y otros.
“Mirá que (los policías indagados) tuvieron que mentir en su acta de procedimiento, donde se menciona que el menor es detenido por un asalto en la vía pública; sin embargo, ahora confesaron que no fue así”, detalló Ortúzar. El fiscal solicitó arresto domiciliario para los policías.
el caso. Según la carpeta fiscal, los tres agentes policiales de la Comisaría 21ª Metropolitana atraparon a un menor de 14 años a quien sindicaron como un motochorro y en cuyo poder plantaron presuntamente un arma de fuego, cuando en realidad el adolescente protagonizó una pelea con su pareja de 25 años, a quien dejaba para ir a casa de sus padres.
El hecho se registró el pasado miércoles sobre 24ª Proyectada, entre Brasil y Estados Unidos, de Asunción. La joven de 25 años relató que discutió muy fuerte a causa de celos con el menor, con quien tienen una hija de 4 meses.
En ese momento, aparecieron los policías, quienes detuvieron al menor, le plantaron el arma de fuego y le sacaron la mochila con sus ropas y un celular que le regalaron. Todas estas evidencias fueron presentadas por la Policía como un botín, el cual nunca existió porque la pareja del menor desmintió el caso ante el fiscal Rogelio Ortúzar.