Todavía con la adrenalina del estreno de La redención, en donde interpreta a Marlene, nieta de un excombatiente de la Guerra del Chaco, la actriz Lali González expresa estar feliz de volver al ruedo de la cinematografía paraguaya. ”Hace mucho tiempo que trabajo afuera y volver a la cartelera del país es bastante gratificante. Qué mejor que volver con una película que hace homenaje a nuestra historia”, manifiesta la joven artista paraguaya.
–¿Costó filmar un largometraje ambientado en otra época?
–Siempre una película de época implica más cuidado en los detalles tanto de vestuario, arte y en la forma de hablar de los personajes. Es un trabajo bastante minucioso. Interpretar un papel siempre me cuesta. Si bien disfruto y gozo cada personaje, me exijo bastante, a veces creo que eso está mal y cuando entro en crisis me doy un respiro. Pero finalmente me quedo tranquila y satisfecha al verme en la pantalla grande y saber que di lo mejor pude y tuve en ese momento.
–¿Investigaste sobre la Guerra del Chaco para encarar tu papel?
–Tuve que hacer una revisión histórica de los diferentes acontecimientos después de la Guerra del Chaco, cuando pensamos que lo sabemos todo nos encontramos con varias sorpresas. Finalmente fui descubriendo que mi personaje no estaba muy lejos de mí, yo tampoco conocí a mi abuelo paterno y trabajé esa búsqueda y curiosidad que siempre tuve hacia él. Mis dos abuelos fueron mi inspiración.
–¿Qué verán los espectadores en el cine?
–Verán una película que no solo hace una revisión histórica, sino un homenaje a nuestros héroes. Y desde un lado muy sutil y melancólico les hará reflexionar si realmente esa lucha, esa guerra, ese sacrificio, valió la pena. Saldrán del cine conmovidos. Muchos se harán preguntas sobre sus familiares. La búsqueda sobre los nuestros siempre está.
–¿Cuál es el filme que marcó tu carrera?
–Todos marcan y dejan una huella en mi corazón. Esta es mi película número 10. Lo digo con mucho orgullo y felicidad porque me costó bastante, cada día de trabajo, hasta hoy. Cada estreno lo disfruto como si fuera la primera y la última vez. Verme cumplir mis sueños y vivir de lo que yo amo es el mejor regalo que hasta ahora me permitió la vida.
–Pudiste expandir tu carrera en Paraguay y también en el exterior...
–En total trabajé en 12 películas. Redondeando son 10 filmes en donde participé como actriz. En una me “cortaron”, significa que filmé pero a la hora de edición y estreno yo no estaba. Es algo que hay que contar y que a cualquier actor le puede pasar y forma parte de nuestra carrera. No todo es color de rosas. En otro proyecto trabajé como colaboradora de guion. El cine me llevó a Argentina, Honduras, Colombia y Brasil. Por eso volver a estrenar en Paraguay, con una película que hace homenaje a nuestra historia, es muy significativo para mí.
–¿Cómo fue dirigir el video del cantante Acho Laterza?
–Fue una experiencia bastante particular de lo que vengo realizando silenciosamente detrás de cámaras. Me di cuenta de que también me apasiona. El videoclip de Acho fue un antes y un después para lo que quiero seguir haciendo detrás de cámaras.
–Teatro, cine, producción. ¿Dónde te sentís más cómoda?
–En cualquiera de ellos, siempre y cuando me dejen disfrutar y expresar con mi trabajo lo que siento a través del arte. Pero sin duda la actuación es mi verdadero amor. Hacer cine y verse en pantalla es una sensación única. Hacer teatro y escuchar aplausos, risas y el calor del público, es indescriptible.
–¿Cómo ves el crecimiento y evolución del cine nacional?
–El público paraguayo forma parte de la construcción de esta incipiente industria de cine. Necesitamos un público crítico que crezca con nosotros. El cine también refleja la situación cultural, económica y social de un país, que luego nos representa en el exterior. Necesitamos construir juntos esta historia. Yo creo en el cine y en el público paraguayo. De a poco estamos preparándonos para tiempos mejores. El cine es cultura y es necesario. Paraguay tiene muchas historias que contar.