Mientras un sector sostiene que los dos parlamentarios merecen ser suspendidos y sin goce de sueldo, otro sector señala que deberían recibir nada más un apercibimiento verbal o escrito.
Baruja y Portillo están en el banquillo de los acusados por cobrar en concepto de viáticos y pasajes aéreos sin realizar ningún viaje. Ambos deberán comparecer en la fecha ante la Comisión de Asuntos Constitucionales para presentar sus respectivos descargos.
La reunión con Baruja está prevista para las 10.00 y con Portillo, a las 10.45.
Una vez que la Comisión escuche a los parlamentarios, se reunirán el miércoles de manera extraordinaria para emitir un dictamen sobre si corresponde o no una sanción a los legisladores por transgresión del Código de Ética.
informes. Desde la Comisión solicitaron copias de los antecedentes de los supuestos viajes realizados por los citados legisladores.
Pidieron al director administrativo de la Cámara, Alfredo Mongelós, los antecedentes del cobro de viáticos. Estos documentos al igual que el descargo de Baruja y Portillo serán analizados para la emisión del dictamen.
Una vez que se tenga el referido dictamen, el pleno de la Cámara ya podrá expedirse al respecto y en la sesión ordinaria del jueves ya se trataría el tema.
El Código de Ética de la Cámara Baja establece que el castigo que puede corresponderles a ambos legisladores es la amonestación verbal o escrita, o suspensión por hasta 60 días sin goce de sueldo.
Si los parlamentarios son suspendidos en sus funciones, deberán asumir sus respectivos suplentes.
ANTECEDENTES. Portillo cobró viáticos de G. 20 millones por un viaje a Las Vegas, Estados Unidos, en diciembre de 2013, con el objetivo de participar en un seminario sobre gasto público. El dirigente liberal no viajó, debido a que llegó tarde al aeropuerto.
En cuanto a Baruja, el diputado viajó en enero a Cancún, México, para participar en un Congreso Mundial de Menopausia, que sin embargo tuvo lugar tres meses después
Ambos legisladores devolvieron el importe de los viáticos recién en agosto, luego de quedar evidenciados por la prensa.