EFE
Al Sabah, que copreside la cita diplomática junto al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, invitó a los participantes a mostrar su generosidad ante el sufrimiento del pueblo sirio y la población de los países vecinos.
A la cumbre asisten representantes de 67 países y numerosas organizaciones humanitarias y agencias de Naciones Unidas.
El emir kuwaití recordó que su pueblo se ha volcado con los sirios desde que comenzó la represión de las protestas populares en marzo de 2011 y destacó que el conflicto entra en su quinto año.
Añadió que la contribución económica del rico emirato del Golfo pretende “enviar el mensaje a los hermanos sirios de que, a pesar de la continuación de esta trágica situación, la comunidad internacional está con ellos, sufre con ellos su dolor y no les abandonará a su suerte”.
Al Sabah subrayó que “nos encontramos ante la mayor catástrofe humanitaria presenciada por la humanidad en la actual era de la historia”.
Esta es la tercera vez que Kuwait es el escenario de la Conferencia de Donantes para Siria auspiciada por Naciones Unidas Kuwait, según recordó el emir, que aseguró que el 90 por ciento de los compromisos de la segunda conferencia habían sido satisfechos.
“Confiamos en que la cita obtendrá una respuesta acorde y generosa para atender las necesidades de nuestros hermanos sirios”, agregó Al Sabah.
Las organizaciones humanitarias presentes en la cumbre celebrada en el Palacio de Bayan de la capital kuwaití confían en lograr que los países más desarrollados anuncien y desembolsen las ayudas, para que no ocurra lo que el año anterior en la que calculan solo fue desembolsado el 62% comprometido.