El pupilo del español Suso Morlán, el mismo entrenador que acompañó a David Cal en el tiempo que ganó cinco medallas olímpicas, afirmó que ya hizo historia como el primer brasileño en ganar una presea olímpica en piragüismo, pero que quiere hacerlo como el primero con tres metales en unos mismos Juegos Olímpicos.
Queiroz, de 22 años, disputará este viernes junto a Erlon de Souza las eliminatorias en la prueba de C2 1.000 metros y es uno de los favoritos al oro el sábado debido a que ambos son los actuales campeones mundiales.
“Es un hecho histórico. Una satisfacción muy grande entrar en ese álbum de los mejores atletas brasileños en Juegos Olímpicos. Estar al lado de (el nadador) César Cielo y de todos los que consiguieron dos medallas en unos Juegos”, afirmó el palista que aprendió las artes del piragüismo en la canoa de pescadores que usaba como transporte en su Bahía natal.
“Estoy muy feliz con ese resultado pero quiero ir aún más lejos y llegar a donde ningún brasileño lo hizo, que es conquistar tres medallas en la misma edición de unos Juegos Olímpicos”, agregó.
Para el brasileño perder el oro el sábado no está en su guión. “La confianza (en el oro) es muy elevada. Entrenamos mucho y sabemos que es posible ganar medalla en C2. Por la tarde entrenaré de nuevo ¿Quien dijo que voy a descansar?”, afirmó.
Queiroz consiguió el bronce este jueves tras una espectacular remontada y luego de que los jueces analizaran la fotografía de llegada debido a que pasó la meta a la par del español Sete Benavides, que fue cuarto en Londres 2012 y volvió a repetir la posición en Río de Janeiro.
El brasileño, con un empujón final y determinante a la canoa en meta y tras haber arrancado en las posiciones de atrás, marcó un crono de 39.628 y se quedó con el bronce y el español, con 39.649, se quedó a 21 milésimas del podio.
El oro se lo colgó el ucraniano Iurii Cheban, campeón olímpico en 2012, campeón mundial en 2014 y segundo en el circuito de este año, que cruzó los 200 metros en la Lagoa Rodrigo de Freitas con un tiempo de 39.279. El azerbaiyano Valentin Demyanenko, campeón mundial en 2013, conquistó la plata.
“No sabía que había ganado (el bronce). Aunque salí bien, terminé dando remadas en falso después. La piragua patinó mucho y vi que los demás colocaron medio barco y hasta un barco delante de mí”, admitió el brasileño.
Pero la corta distancia de la prueba no le impidió remontar como, dijo, lo hizo en una prueba en el Mundial de Italia el año pasado.
“Si no hubiera sido por esos errores, creo que podía haber ganado el oro. Cuando llegué y aventé el barco no sabía la posición. Pensé que había perdido la medalla”, admitió.
Queiroz agregó que los segundos que pasaron antes de que los jueces definieran el tercer lugar fueron eternos y lo dejaron bastante nervioso.
“Pero cuando salió, me puse feliz. Una medalla de bronce es muy importante en el currículo de un atleta, principalmente si es de Juegos Olímpicos. Conseguí otra medalla e hice historia para el piragüismo de Brasil”, afirmó.
Las pruebas de piragüismo, en canoa (C) y kayak (K) se disputan hasta el sábado en la Lagoa Rodrigo de Freitas, una laguna exprimida entre la playa de Ipanema y el cerro del Corcovado cuyas aguas generaron polémica por su nivel de contaminación, aunque el COI ha garantizado que están en niveles adecuados para la salud.