Economía 2016: Un comienzo difícil

César Barreto Otazú Miembro de Dende

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Por César Barreto Otazú (*)

“La recuperación de la economía global continúa, pero a un ritmo lento y crecientemente frágil” es la forma en que el Fondo Monetario Internacional inicia su informe sobre el estado de la economía mundial para este año, y que fue presentado recientemente.

Los economistas del FMI han revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento del PIB mundial como ya acostumbra hacerlo en los últimos años. Paralelamente, el Banco Central de EEUU (la FED) ha decidido reducir el ritmo de incrementos de su tasa de interés de política monetaria, debido a una repentina desaceleración de la economía norteamericana desde el último trimestre del 2015.

Esta decisión de la FED ha dado cierto respiro a los mercados financieros internacionales y a las economías emergentes del mundo. Con esto se ha reducido el fortalecimiento del dólar frente a las otras monedas, lo que a su vez ha impactado positivamente en los precios de los commodities, incluida la soja, nuestro principal producto de exportación.

Por otro lado, nuestros vecinos han intercambiado roles en sus efectos sobre nuestro país en los últimos meses.

La Argentina empieza a transitar por un proceso de ordenamiento de su política económica. Esta semana ha retornado exitosamente a los mercados internacionales de capitales al colocar bonos soberanos por un total de USD 16.500 millones.

Este acceso a nuevo financiamiento externo le da tiempo al Gobierno argentino para realizar los ajustes, reducir el crónico déficit fiscal y la inflación de una manera gradual, y reactivar la inversión privada y el crecimiento económico.

Sin embargo, en el Brasil, se ha profundizado la recesión de la economía con el agravante de una crisis política que imposibilita tomar las duras decisiones económicas para realizar los ajustes que son necesarios para restaurar la confianza y reactivar la inversión y el crecimiento económico. Este año está prácticamente perdido y probablemente gran parte del 2017.

Este es el contexto general en el cual están operando los distintos sectores y agentes económicos de nuestro país.

En los primeros meses del año cayeron las exportaciones (-13%), las importaciones (-22%) y las ventas de automóviles (-10%), además de la continua caída del comercio fronterizo con el Brasil, según reportan los datos del Banco Central del Paraguay.

Además, hay que sumar los efectos negativos que tuvo la ley de tarjetas de crédito sobre la actividad comercial. Impactó principalmente en la venta de electrodomésticos (-9%) y las ventas de las tiendas y shoppings (-10%).

Por otro lado, las continuas lluvias redujeron la ejecución de las obras viales y algunos proyectos inmobiliarios importantes fueron completados hacia fines del 2015. Así, la venta de materiales de construcción experimentó una caída del 10% en los primeros dos meses del año.

Sin embargo, estas mismas lluvias tuvieron un impacto positivo en la cosecha de soja con rendimientos excelentes en todas las regiones del país y en la producción de energía de las entidades binacionales que se incrementó gracias a los altos niveles de los embalses de Itaipú y Yacyretá.

Además, la eliminación del control de cambios en Argentina redujo los incentivos al contrabando. Esto mejoró la competitividad de los supermercados locales y posibilitó un leve crecimiento de sus ventas en un 2% respecto al año pasado.

En conjunto, con estos dispares desempeños sectoriales, el estimador del PIB que publica mensualmente el BCP indica que la economía paraguaya creció alrededor del 2,2% el primer bimestre del año.

Así empezamos económicamente este año 2016, que esperábamos iba a ser difícil. Nosotros mantenemos nuestra proyección de un crecimiento del PIB cercano al 3% para este año, esperando que en los próximos meses mejore el ritmo de ejecución de las obras viales y de la construcción de viviendas.

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