Añadió que difícilmente habrá transparencia en la revisión de las cuentas si realizan los mismos funcionarios que están o estuvieron involucrados en la administración de Yacyretá. Dijo que bajo ningún concepto se debe implementar una novación de la deuda de EBY con el Tesoro argentino, ya que esto sería hipotecar su energía, como se pretendió en el preacuerdo del 2006.
Para Montanía, Paraguay también tiene que ser firme en lo concerniente a las obras, que los argentinos están muy apurados en ejecutar, como la maquinización del Aña Cuá y la instalación de nuevas turbinas en la central.
“Indudablemente son obras que deben ejecutarse, pero una vez revisado y actualizado el Anexo C del Tratado, donde debe definirse la fijación de la tarifa de la energía eléctrica, los contratos de comercialización, el pago de compensaciones, y el manejo equitativo del dinero por la venta de la energía”, indicó.
Agregó que se tiene que determinar la nueva tarifa de la energía de Yacyretá y el monto va a depender en gran porcentaje de sus compromisos financieros, por lo que es fundamental llegar a un acuerdo de la conciliación de cuentas.
Asimismo, mencionó que se debe elaborar un nuevo contrato de comercialización de la energía que estipule el pago puntual de ANDE y Ebisa, y que contemple la aplicación de intereses moratorios y punitorios si es que no se paga en fecha. Remarcó que actualmente más del 90% de la energía de Yacyretá se comercializa en el mercado argentino, y Paraguay, para poder pagar sus compromisos financieros, debe “mendigar” mes a mes para que parte de esos ingresos le sea transferido.