Dos internas con sus hijas montan empresa de comidas en Buen Pastor

Cate & Ring se llama el emprendimiento que se inició tras las rejas y que realiza delivery de bocaditos y catering para eventos. Comenzó como algo pequeño y con el tiempo se fue volviendo un negocio familiar.

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Crecidas. Elva Flores y Cristina Rolón trabajan coordinadas con sus hijas Jesenia y Mar.

Elba Flores y Cristina Rolón se conocieron en la Cárcel de Mujeres Casa del Buen Pastor y hace tres años hicieron realidad el sueño de montar su propia empresa de servicio de comidas, que hoy en día es todo un éxito.

Tras las rejas de la cárcel de mujeres dieron vida a Cate & Ring, el emprendimiento tiene la valiosa ayuda de sus hijas y otras tres compañeras. “Iniciamos hace tres años con un sueño y hoy estamos bastante creciditos; ya compramos como 20 bufeteras para eventos”, cuenta orgullosa Elba, que está acompañada de su hija Mar, quien le sirve de nexo para la presentación de los productos afuera. “Hoy por ejemplo (por ayer) tenemos una boda para 300 personas y tenemos que ofrecer comida variada”, añade.

Cristina Rolón también cuenta con la ayuda de su hija Jesenia, que no oculta su orgullo de poder colaborar con la reinserción de su madre.

La mujer está recluida por microtráfico, pero asegura que con este trabajo tiene un nueva oportunidad para salir adelante.

La rutina de las internas comienza muy temprano y no tienen horarios. Trabajan desde la mañana en la panadería del penal, cocinando los productos. “Tenemos permiso especial con el tema del horario, para que nuestras hijas vengan a llevar los productos”, cuenta Elba.

Tanto ella como su compañera descubrieron sus habilidades para cocinar cuando participaron de los cursos realizados en el penal y luego se fueron perfeccionando.

Las mismas no quisieron precisar el monto que les deja de ganancia este trabajo, pero sostuvieron que les da la posibilidad de mantenerse dentro del penal e incluso a ayudar a sus familiares y a sus compañeras.

Junto a ellas, también trabajan Alejandra Aguayo e Isabel Enciso para la cocción de los productos.

Segunda oportunidad. Elba Flores está condenada a 19 años de cárcel. Estuvo involucrada en el sonado caso del robo de vehículo y asesinato de la abogada Sarah Riva de Vasconcellos, ocurrido en el año 1993, y fue detenida 19 años después.

La mujer mantenía la esperanza de estar en la lista de candidatas para el indulto, y a pesar del error cometido, asegura que dio muestras de merecer otra oportunidad.

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