AFP y EFE
RÍO DE JANEIRO - BRASIL
El presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, desembarca hoy, martes, en Brasilia, para iniciar el proceso de transición, que incluye su primera reunión con el mandatario Michel Temer.
“Esta semana damos otro gran paso con el inicio del funcionamiento del grupo de transición de gobierno, absorbiendo informaciones para la reestructuración de Brasil”, tuiteó Bolsonaro ayer.
Bolsonaro, que aún carga una bolsa de colostomía por una puñalada en el abdomen que recibió el 6 de setiembre, fue electo el 28 de octubre como el nuevo presidente del Brasil.
Se espera que Bolsonaro participe hoy junto a los líderes del Congreso en un acto conmemorativo de los 30 años de la Constitución de 1988 y que mañana se reúna con Temer en el Palacio presidencial de Planalto.
El futuro jefe de gabinete, Onyx Lorenzoni, se encuentra en la capital desde ayer para reunirse con Eliseu Padilha, principal ministro y mano derecha de Temer.
Lorenzoni fue nombrado oficialmente ayer ministro extraordinario para coordinar el equipo de transición que trabajará en las instalaciones del Centro Cultural Banco do Brasil (CCBB), a 3 km de Planalto, en Brasilia.
En la primera semana desde la elección de Jair Bolsonaro, se hicieron públicos los nombres de 5 futuros ministros.
El último, y el de mayor impacto mediático, fue el del popular juez Sergio Moro, responsable de la Operación Lava Jato y autor de la condena al ex presidente Lula, que aceptó el puesto de ministro de Justicia.
Los otros son el astronauta Marcos Pontes, designado al frente de la cartera de Ciencias; el general de reserva Augusto Heleno Ribeiro en Defensa; Lorenzoni en la Casa Civil (jefatura de gabinete) y el economista ultraliberal Paulo Guedes al frente de un superministerio de Economía.
Bolsonaro se reunió ayer con el embajador de Italia en el país, Antonio Bernardini, con quien conversó, entre otros asuntos, sobre la posible extradición del ex activista italiano de izquierdas Césare Battisti, condenado por cuatro asesinatos en su país. “Obviamente hablamos del caso Battisti. Se trata de un caso muy claro. Italia lo pide en extradición y la solicitud es analizada por la Corte Suprema. Esperamos que el Supremo tome una decisión lo más rápido posible”, afirmó el diplomático.
Bernardini se abstuvo de responder si Bolsonaro se comprometió con la extradición cuando asuma su mandato, el 1 de enero próximo, pero dejó claro que la posición del presidente electo de Brasil sobre el asunto es la misma que tiene el Gobierno italiano.